Enredarse en Red de Emisoras

REFLEXIONES EN FRONTERA, jesuita Guillermo Ortiz

(RV).- En El Salvador encontré la feliz sorpresa de una relación muy estrecha de monseñor Romero con la radio. Mucho más esencial de lo que yo conocía porque el beato Romero propulsó la radio en su diócesis, quería que la gente del campo pudiera participar de la Misa al menos por la radio y después, esa cercanía física que había logrado con el pueblo, pudo sostenerla gracias a la radio cuando ya era un condenado a muerte por el poder y con esta comunicación, con sus homilías sostuvo la moral de la gente en estos tiempos de atropello asesino de guerra, de masacre.

Es que el poder de la radio para llegar a los que están más lejos y solos es como la vocación esencial del medio radiofónico y quizá más todavía, la radio tiene la vocación de unir a gente distante, diversa y tantas veces abandonada en una familia de audiencia que comulga en una esperanza, en una razón de ser.

La radio se vuelve la excusa para el encuentro y después fortalece las relaciones que el encuentro genera, expresa el experto jesuita José Victoriano. En Latinoamérica tenemos realidades radiofónicas como IFER, IGER, IHER de Costa Rica, Guatemala y Honduras respectivamente dedicadas a la educación radiofónica por ejemplo, todas ellas inspiradas en el sistema ECCA de Canarias y fundadas por el jesuita Tatembag.

También está la red de escuelas radiofónicas de fe y alegría fundada por el jesuita Velas y en Santo Domingo, por ejemplo, una presencia fuerte de emisoras como las que une UDECA como es el caso de la radio Santa María de los jesuitas con 4,551 graduados de primaria y secundaria en el 2015 que lleva ya 60 años en el aire y que realiza una obra de educación digna de conocerse, de apoyar, de acompañar.

Radio Vaticana está en esta red de emisoras, debe integrarse y tiene que fortalecer y consolidar su pertenencia y su aporte al trabajo de esta gente por el pueblo. Muchas de estas emisoras transmiten toda o parte de la producción de la redacción de programas en español de Radio Vaticana e interactúan con ella porque la gente quiere escuchar la voz del Papa. Por lo tanto, es parte de nuestro trabajo conocer las emisoras de radio, ver los rostros de las personas que trabajan en un proyecto directo con la audiencia donde nosotros aportamos la voz de Francisco.

En un mundo en red el mejor camino es “enredarse” bien para nutrirse solidariamente de la vida plena que ofrece Jesús vivo en nuestras comunidades.

Para tu radio, Reflexiones en frontera, jesuita Guillermo Ortiz.