(RV).- Miles de fieles y peregrinos argentinos continúan atravesando la frontera para venir a ver a “su” Papa. Es que saben que la oportunidad de tener a Francisco tan cerca es tal vez única. Las autoridades argentinas estiman en un millón y medio el número de personas que pasarán al Paraguay para participar en esta visita. Sin contar los tantos paraguayos residentes en el extranjero y los numerosos fieles de otros lugares, como el Brasil y países cercanos.
La alegre invasión de la fe continúa en estas horas y no se detendrá hasta el mismo domingo. El medio de transporte utilizado mayormente es el ómnibus que es de todos los tamaños y colores. Desde los más modernos y dotados de las últimas comodidades hasta pequeños destartalados y humildes buses de transporte local. La atmósfera que se respira viendo llegar a estos peregrinos a Asunción es contagiosa.
En medio del tráfico se les oye rezar y cantar. Por momentos podrían parecer fanáticos de algún equipo de fútbol que ondeando sus banderas nacionales se dirigen a ver un partido. Esta gran alegría y expectativa no quita el verdadero significado: venir a abrazar al hermano que ahora está lejos, en Roma, escuchar su palabra y confirmarse en la fe.
Desde Asunción, en salida misionera con el Papa Francisco, Raúl Cabrera, Radio Vaticano
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