Card. Sandri en Etiopía, con un mensaje de paz y bendición del Papa

(RV).- «Diálogo y encuentro», «Iglesia en salida, hacia todos los que no conocen aún a Jesucristo y hacia todos los que sufren», como alienta el Papa Francisco. El Card. Leonardo Sandri,  viajó a Etiopía, para manifestar,  como  Prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, atención y cercanía al camino de la Iglesia alejandrina etíope de rito ghéez, que era la lengua oficial en el siglo V, cuando se hicieron las primeras traducciones de los textos bíblicos y litúrgicos en este país. «Un país abierto al diálogo con una Iglesia en primera fila en su apostolado, sosteniendo a los últimos», destaca el purpurado, que cuenta que ha recibido un regalo para el Papa.

En una entrevista de Gabriella Ceraso, el Card. Sandri pone de relieve asimismo la antigua tradición cristiana en Etiopía, que se remonta al siglo IV, con san Frumencio. En la actualidad, la mayoría de los 85 millones de habitantes, es ortodoxa, el 43%; el 33% son musulmanes; el 18% son protestantes. Y luego está nuestra Iglesia católica latina, una minoría, con Vicariatos Apostólicos, y con nuestras tres Eparquías:

«Por lo tanto, un país en el que se verifican las palabras que el Papa Francisco utilizó visitando Turquía: diálogo y encuentro. Ésta es la realidad de la Iglesia católica en este país, un país llamado al diálogo con los ortodoxos de parte de los católicos, con los musulmanes, con los otros cristianos. Así como con la gran multitud de gente que viene de las religiones tradicionales, pero sobre todo con la multitud de gente que vive en condiciones verdaderamente humildes y que por lo tanto tiene necesidad de la alegría del Evangelio, brindado en el compartir, en la solidaridad.

Le pedí al Santo Padre poder llevar su mensaje de paz y de bendición. Viajé para dar, visitando todas las Eparquías, un impulso misionero de proclamación del Evangelio, de Iglesia en salida, hacia todos los que no conocen aún a Jesucristo y hacia todos los que sufren.

Pero sobre todo la Iglesia católica da un testimonio de unidad y de apertura en el encuentro con todos los que sufren, en los hospitales, en las escuelas, la cercanía a los más necesitados, a los sin techo. En esto la Iglesia católica en Etiopía está verdaderamente en primera línea, para testimoniar que el Evangelio es anunciado a los pobres. He mantenido un encuentro con laicos, sacerdotes, religiosos, religiosas y jóvenes: he visto su  gran entusiasmo en brindar la alegría del Evangelio a esta sociedad – como dice el Papa Francisco en su Exhortación Apostólica. Y hasta me han dado un regalo para el Papa: la traducción de la Evangelii Gaudium en su lengua, que entregaré al Papa en la primera ocasión en que lo vea».

(CdM – RV)