(RV).- (Con audio) No nos cansemos
de rezar por la paz. Así comienza el editorial 32 del Noticelam, el boletín del
Consejo Espiscopal Latinoamericano. Y sí. Tenemos que ponerle fuerza a la oración.
En todas partes. Desde cualquier situación. Tenemos que creer que sumando oración
arrimamos nuestra voluntad en la construcción de la paz. Medio Oriente nos necesita
orantes y firmes en la esperanza de que la paz es posible. El mundo entero necesita
de hombres y mujeres capaces de creer en una humanidad que anhela paz sin fronteras
ni exclusiones, escriben los redactores del Noticelam. La emergencia humanitaria
de la frontera con los Estados de Unidos también necesita de nuestra oración comunitaria
y nuestro compromiso para que visualicemos en nuestros corazones a “los inmigrantes,
rostros sufrientes de Cristo” en palabras del cardenal Pietro Parolin, secretario
de Estado de la Santa Sede, en la basílica y santuario de la Virgen de Guadalupe,
en México. “Madre, pasa esta oración, por tu corazón, llévala hasta el cielo, hasta
el Señor”, dice una dulce plegaria cantada en las misas de Argentina y Uruguay. Cuando
el Papa Francisco era solo el cardenal Bergoglio, en una fiesta mariana en un barrio
de Buenos Aires resaltó “el apuro” que tenía María por visitar a su prima Isabel.
Resaltó su apuro por hacer el bien, por estar cerca, por visitar y abrazar - se lee
en el editorial. Es a la misma Virgen María que hoy podemos encomendar a nuestros
hermanos migrantes, especialmente nuestros hermanitos más chiquitos, para que encuentren
calidez y rapidez en los hermanos que los reciban en los países vecinos. La misma
Virgen que va a escuchar nuestro pedido por las víctimas de la guerra, especialmente
los huérfanos, para que encuentren nuevos hogares con almas generosas que los abracen
y hagan más fácil transcurrir este tiempo de miedo y desamparo. Los redactores
del Noticelam nos cuentan lo que han preparado para esta edición: equipos de comunicación
repiensan el área de la Santa Sede y novedades en las aplicaciones digitales pontificias;
un documental danés sobre la contracara de Mundial de Futbol de Brasil; reseñas sobre
las asambleas episcopales en Colombia, República Dominicana y Venezuela; obispos europeos
y guatemaltecos en comunión ante la defensa de la vida y el medio ambiente en Guatemala;
peregrinación de las comunidades eclesiales de base en Brasil y el chikungunya en
Dominicana y Haití. En el editorial también se destacan los nombramientos de obispos
en el continente americano: monseñor Jorge Aníbal Quintero como obispo de Barcelona
en Venezuela; Obispo Tarcisio Scaramussa, S.D.B., como obispo coadjutor de Santos
en Brasil; y Obispo Juan Carlos Vera Plasencia, M.S.C. como Ordinario Militar de Perú. (MCM-RV)