Mensaje del Papa al Foro de Davos: Un enfoque inclusivo que tenga en cuenta dignidad
de toda persona y bien común
(RV).- El Obispo de Roma, en un mensaje enviado al Foro Económico Mundial de Davos,
invita a tener un enfoque inclusivo que tenga en cuenta la dignidad de toda persona
humana y el bien común. “Confiando en que este encuentro brinde una oportunidad para
una reflexión más profunda sobre las causas de la crisis económica que sacude al mundo
en los últimos años”, escribe el Papa en su mensaje al presidente ejecutivo del Foro
económico mundial, Profesor Klaus Schwab, donde aporta algunas consideraciones con
la esperanza de que puedan enriquecer los debates del Foro de Davos y “dar una contribución
útil a su importante labor”.
En la edición 2014 de la reunión anual del Foro
Económico Mundial, que comienza este miércoles en Davos, Suiza, participarán cerca
de 40 jefes de Estado y de Gobierno. En total más 2.500 participantes procedentes
de casi 100 países, entre los que se incluyen más de 1.500 líderes empresariales de
las mil compañías que forman parte del Foro, además de representantes de organizaciones
internacionales, la sociedad civil, los medios de comunicación, la educación y las
artes.
El Foro Económico Mundial fue fundado en 1971 por Klaus Schwab, profesor
de economía de Suiza, quien ha asegurado que este año el encuentro se produce con
el mundo en un "momento crítico", ya que la reducción de crisis económicas en el corto
plazo da lugar a la necesidad "profunda" de nuevas reformas estructurales en los mercados
emergentes.
Mensaje del Papa al Foro de Davos:
Al
Profesor Klaus Schwab Presidente ejecutivo del Foro económico mundial
Le
agradezco mucho su amable invitación para dirigirme a la reunión anual del Foro Económico
Mundial, que, como de costumbre, se celebrará en Davos- Klosters, a final del mes.
Confiando en que este encuentro brinde una oportunidad para una reflexión más profunda
sobre las causas de la crisis económica que sacude al mundo en los últimos años, quisiera
aportar algunas consideraciones con la esperanza de que puedan enriquecer los debates
del Foro y dar una contribución útil a su importante labor.
La nuestra,
es una época de grandes cambios y avances significativos en diversas áreas, y esto
tiene consecuencias importantes para la vida humana. Efectivamente "son de alabar
los avances que contribuyen al bienestar de la gente, como, por ejemplo, en el ámbito
de la salud, de la educación y de la comunicación” (Evangelii Gaudium, 52), así como
en muchos otros sectores de la actividad humana, y hay que reconocer el papel fundamental
desempeñado por la economía moderna en estos cambios, a la hora de fomentar y desarrollar
los recursos inmensos de la inteligencia humana. Sin embargo, los objetivos logrados
-aunque hayan reducido la pobreza de un gran número de personas - a menudo han llevado
aparejada una amplia exclusión social. De hecho, la mayor parte de los hombres y
mujeres de nuestro tiempo siguen experimentando la inseguridad cotidiana, y no raramente
con consecuencias trágicas. Con respecto a vuestra reunión, me gustaría
hacer hincapié en la importancia que tienen los distintos sectores políticos y económicos
en la promoción de un enfoque inclusivo que tenga en cuenta la dignidad de toda persona
humana y el bien común. Me refiero a la atención que debería plasmar cualquier decisión
política y económica, pero que, de momento, parece ser poco más que un replanteamiento.
Los que trabajan en estos sectores tienen una responsabilidad precisa para con los
demás, especialmente con los más frágiles, débiles y vulnerables. Es intolerable
que todavía miles de personas mueran cada día de hambre, a pesar de las grandes cantidades
de alimentos disponibles y, a menudo, simplemente desperdiciados. Del mismo modo,
no pueden dejar de impresionarnos los innumerables refugiados que buscando condiciones
de vida con un mínimo de dignidad, no sólo no consiguen encontrar hospitalidad,
sino que a menudo mueren trágicamente mientras se desplazan de un lugar a otro. Sé
que estas son palabras fuertes, incluso dramáticas, pero al mismo tiempo quieren reafirmar
y desafiar la capacidad de este Foro para marcar la diferencia. De hecho, los que
han demostrado la capacidad para innovar y mejorar la vida de muchas personas a través
de su creatividad y experiencia profesional, pueden ofrecer una contribución adicional
poniendo sus capacidades al servicio de los que aún viven en medio de una terrible
pobreza. Hace falta, por lo tanto, un renovado, profundo y amplio sentido
de responsabilidad por parte de todos. “La vocación de un empresario es una noble
tarea, siempre que se deje interpelar por un sentido más amplio de la vida” (Evangelii
Gaudium , 203). De este modo, los hombres y las mujeres pueden servir más eficazmente
al bien común y hacer que los bienes del mundo sean más accesibles para todos. Sin
embargo, el crecimiento de la igualdad requiere algo más que el crecimiento económico,
aunque si lo presupone. Se requiere, en primer lugar, "una visión trascendente de
la persona" (Benedicto XVI , Caritas in Veritate, 11 ), porque "sin la perspectiva
de una vida eterna, el progreso humano en este mundo se queda sin aliento”. (Ibid)
. Además, necesita decisiones, mecanismos y procesos encaminados a una mejor distribución
de la riqueza, la creación de fuentes de empleo y la promoción integral del pobre,
que va más allá de una simple mentalidad de asistencia.
Estoy convencido
que una apertura tal a lo trascendente puede dar forma a una nueva mentalidad política
y económica, capaz de reconducir toda la actividad económica y financiera dentro de
un enfoque ético que sea verdaderamente humano. La comunidad económica internacional
puede contar con muchos hombres y mujeres de gran honestidad e integridad personal,
cuya labor se inspira y guía por nobles ideales de justicia, generosidad y atención
por el auténtico desarrollo de la familia humana. Os exhorto a aprovechar estos grandes
recursos humanos y morales, y a haceros cargo de este desafío con determinación y
visión de futuro. Sin ignorar, por supuesto, los requisitos específicos, científicos
y profesionales, de cada sector, os pido que os esforcéis para que la humanidad
se sirva de la riqueza y no sea gobernada por ella.
Estimado Presidente,
queridos amigos espero que podáis ver en estas breves palabras un signo de mi atención
pastoral y una aportación constructiva para que vuestra actividad sea siempre más
noble y fecunda. Renuevo mis mejores deseos para el éxito de la reunión e invoco la
bendición divina sobre vosotros y los participantes del Foro, así como sobre vuestras
familias y vuestro trabajo.