Mons. Tomasi ante la ONU en Ginebra: Ninguna justificación para cualquier forma de
violencia y explotación de los niños
(RV).- (audio) La Santa Sede, al igual
que otros 139 estados, discutió este jueves en la Oficina de Naciones Unidas en Ginebra
el Informe sobre la aplicación de la Convención de los Derechos del Niño. El informe
fue presentado ante el Comité de la Convención por el observador permanente del Vaticano,
Mons. Silvano Maria Tomasi.
La Iglesia Católica quiere "ser un ejemplo" en
la lucha contra el abuso y la protección de la infancia, señaló Mons. Tomasi. El prelado
-refiriéndose a las "respuestas" escritas a las preguntas formuladas por las Naciones
Unidas- presentó en detalle el compromiso de la Iglesia para afrontar “el horrendo
crimen de los abusos”, tanto a nivel central de la Santa Sede -con la aprobación de
las Directrices para las iglesias locales-, como a nivel de base, en las diferentes
articulaciones eclesiales, particularmente en las estructuras educativas. El arzobispo
Tomasi recordó una serie de instrumentos aprobados en los últimos años, tanto a nivel
interno como internacional, para hacer frente a este "triste fenómeno”.
"Se
trata de un compromiso -dijo Mons. Tomasi-, llevado a cabo en primera persona por
los últimos Papas, y en especial por Benedicto XVI. Y ahora asumido también por el
Papa Francisco, con el anuncio de la creación de una Comisión para la Protección de
Menores”. "No puede haber justificación alguna -reiteró el observador permanente
del Vaticano en Ginebra- para cualquier forma de violencia y de explotación de los
niños”. Y enumeró los pilares del compromiso de la Santa Sede para los niños, presentados
en el informe: “la defensa de la dignidad del niño en todas sus dimensiones y desde
su concepción; el respeto y promoción de los derechos de la familia en la que el niño
crece; el derecho a la educación de los hijos por los padres y la libertad religiosa”.
La Santa Sede, concluyó Mons. Tomasi, da la bienvenida a cualquier "sugerencia que
la Comisión quiera presentar a la Santa Sede para la promoción" y "el respeto a los
derechos del niño" y la "aplicación efectiva de las disposiciones de la Convención
y sus Protocolos".