Papa Francisco: pensemos en nuestra Madre, que está en el cielo con Jesús y celebremos
su fiesta
(RV).- (Con audio) Este jueves, en el
corazón del mes de agosto, los cristianos de Oriente y de Occidente celebran la fiesta
de la Asunción de María santísima al cielo. En el marco de esta solemnidad, el Papa
Francisco saldrá del Vaticano con destino a Castel Gandolfo, a unos 30 Km. al sur
de la Roma, donde visitará el Monasterio de clausura de las Clarisas. Y a las
10,30 de la mañana, en la Plaza de la Libertad, ante el Palacio Apostólico de Castel
Gandolfo celebrará la Santa Misa, con el posterior rezo de la antífona mariana del
ángelus en la Fiesta de la Asunción de María Santísima. Después del almuerzo visitará
de forma privada la Parroquia de Santo Tomás de Villanueva y regresará a la Ciudad
del Vaticano. El Papa Francisco en la cita del rezo dominical que precede esta
solemnidad mariana hizo hincapié en nuestro anhelo y espera de «Cristo mismo, que
vendrá a buscarnos para llevarnos a la fiesta sin fin, como ya ha hecho con su Madre
María Santísima, que la ha llevado al cielo, con Él»: «Queridos hermanos y hermanas:
recordemos que el próximo jueves es la solemnidad de la Asunción de María ¡pensemos
en nuestra Madre, que está en el cielo con Jesús y ese día celebremos la fiesta de
Ella!» En la Iglesia católica, el dogma de la Asunción —como es sabido— fue proclamado
durante el Año santo de 1950 por el siervo de Dios Papa Pío XII. Además es una memoria
que hunde sus raíces en la fe de los primeros siglos de la Iglesia. En Oriente
se llama todavía hoy «Dormición de la Virgen». En un antiguo mosaico de la Basílica
Papal de Santa María la Mayor en Roma, que se inspira precisamente en el icono oriental
de la «Dormitio», están representados los Apóstoles que, advertidos por los ángeles
del final terreno de la Madre de Jesús, se encuentran reunidos en torno al lecho de
la Virgen. En el centro está Jesús, que tiene entre sus brazos una niña: es María,
que se hizo «pequeña» por el Reino y fue llevada por el Señor al cielo. Tenemos
ante nuestros micrófonos al Cardenal Santos Abril y Castelló, Arcipreste de la Basílica
Papal romana de Santa María la Mayor, que nos habla de la profunda devoción mariana
del Papa Bergoglio. En una entrevista realizada por Alberto Goroni, el purpurado español,
recuerda que María sigue acompañando a la Iglesia, a todos los hijos de la Iglesia
y cómo no al Papa Francisco, que en sus cinco meses de pontificado ya visitó cinco
veces este santuario mariano, donde se encuentra la Virgen Salus Populi Romani, el
más antiguo de Occidente.