Francisco defiende la pertenencia de los jóvenes al tejido social
REFLEXIONES EN FRONTERA jesuita Guillermo Ortiz
(RV).- (Audio)
Como un verdadero
“padre” ocupado con su familia; en los jóvenes y los ancianos de la familia grande,
así vemos y escuchamos al Obispo de Roma en estos días.
Antes del viaje rogó
a la Virgen en Santa María Mayor y pidió que se lo acompañe espiritualmente con oraciones
por los jóvenes y por él.
Dijo que los jóvenes son los verdaderos protagonistas
de la JMJ, que los jóvenes quieren escuchar la voz de Jesús y aceptar la misión que
Jesús les da. Pienso que con esto no da un paso al costado del protagonismo de sus
gestos y de su voz, sino que se ubica en el verdadero lugar de “padre espiritual”
que acompaña, que ayuda en el discernimiento de los jóvenes en el encuentro con Jesús.
Durante
el viaje a Río, en el avión con los periodistas, habló de los jóvenes pero sin olvidar
a los ancianos “porque un pueblo tiene futuro si va adelante con todos”, dijo, después
de afirmar que lo importante para él es encontrar a los jóvenes “no aislados de su
vida, sino en el tejido social, en la sociedad porque cuando aislamos a los jóvenes
cometemos una injusticia: les quitamos su pertenencia… Una pertenencia a una familia,
a una patria, a una cultura, a una fe.”
Después de afirmar que a los jóvenes
se los debe considerar insertos en su sociedad de pertenencia, el Papa denunció “la
cultura del descarte” con tantos jóvenes sin trabajo. “¡Tenemos que cortar con la
cultura del descarte!” dijo-, y pidió la cultura de la inclusión, del encuentro, “debemos
hacer un esfuerzo para incluir a todos en la sociedad”.
En Río, Francisco es
un padre espiritual de los jóvenes, ocupado también por la inclusión de los jóvenes
en su sociedad de pertenencia.