Llamamiento del cardenal Rodríguez Maradiaga: no queremos que Honduras se hunda
en el abismo de la violencia
(RV). Con veinte muertes por día, casi noventa víctimas por cada cien mil habitantes,
Honduras es el país con la tasa de criminalidad más alta del mundo. Sólo en 2012 se
registraron casi 10.500 asesinatos. Un verdadero boletín de guerra diaria que la Iglesia
católica, junto con otras muchas realidades de la sociedad civil, busca contrarrestar.
Sobre este tema, el domingo pasado, el cardenal arzobispo de Tegucigalpa,
Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, lanzó un nuevo y vibrante llamamiento. Así lo informó
L'Osservatore Romano. Hablando directamente a cuantos "han tomado el camino de la
delincuencia y el crimen", a los sicarios que "matan por dinero", el cardenal exclamó:
"ustedes hacen lo contrario de lo que Dios quiere. No pueden seguir así. ¡Arrepiéntanse!
¡Pidan perdón. ¡Un día Dios les pedirá cuentas por lo que hacen".
A todo ello
se asocia la preocupación por el posible agravamiento de la situación política durante
las elecciones generales, que el Gobierno ha convocado para noviembre. "¿Vamos a vivir
la próxima campaña electoral en paz o bajo la agresión, la violencia y los insultos?"
se pregunta el cardenal Maradiaga, añadiendo que "si Honduras es verdaderamente un
pueblo que cree en Dios, entonces esto significa que debemos vivir de acuerdo a la
Palabra del Señor". "Entre nosotros, puede haber diferentes formas de pensar, -observa
el purpurado- pero hay que respetar a los demás. Quien hace uso del insulto, la calumnia
y denigra a otras personas no tienen argumentos, por tanto no usa la racionalidad.
No queremos llevar al país al abismo. Para Honduras deseamos desarrollo, crecimiento
y progreso". (ER RV)