La película sobre los Mártires de Barbastro que se fueron a morir fusilados cantando Iglesia
Viva (RV).- (Audio) En Agosto de 1936,
inicio de la Guerra Civil española, 51 miembros de la Comunidad Claretiana de Barbastro
en Huesca, son martirizados, y luego muertos fusilados por su fe. Si tan solo la hubieran
renegado, aunque hubiera sido “de a mentiritas”, digamos que solo para pasar el mal
momento, se habrían salvado. Pero sin embargo no lo hicieron. No se quebrantaron.
No repudiaron su naturaleza, lo que eran y en lo que creían, no abandonaron el tesoro
más grande que todos tenemos y que es la fe… y fue así que murieron gritando “Viva
Cristo Rey, Viva la Virgen María…”. Ahora bien, la trama no es producto de la imaginación
de un guionista cinematográfico, y tampoco inspiración de un desvelado escritor. Así
fue, así sucedió y así nos viene referida la dramática y esperanzadora historia que
ahora llega a las pantallas cinematográficas con el guion de Juanjo Díaz Polo y gracias
al esfuerzo profesional del Director de cine, el español Pablo Moreno y Contracorriente
Producciones; de actores que han prestado su talento y su trabajo a cambio de poco,
y que han hecho posible el sueño de la gran familia claretiana.
Hemos visto
la película, en su pre-estreno el pasado 21 de mayo, en una sala, por cierto, muy
querida, en el centro de la ciudad de Roma: el Cine Farnese. En una tarde lluviosa
que casi parece otoñal me apresuro -entre corriendo y resbalando- sobre el empedrado
de la calle. Llego y si bien es todavía temprano la primera impresión que me llega
es la de la sorpresa: ¡la sala está llena! Pero voy sola, y rápido encuentro un buen
lugar para seguir, a la par, el desarrollo del filme y la reacción del público. Lo
que vi lo refiero: la película española “Un Dios Prohibido” en su preestreno en Roma,
el 21 de mayo, con una sala llena, cautivó a los espectadores desde sus primeras y
alegre escenas arrancando risas y sentimientos de simpatía, pasando por todos los
matices; hasta arrancar la respetable lágrima aquí y allá. Cuando la película terminó
se elevó como “tam tam, clap-clap” un estruendoso e interminable -casi teatral- aplauso
de encomio sonoro. Entonces recordé las palabras que Pablo Moreno había dicho antes,
en la presentación de su obra colectiva: “Era una historia que merecía ser contada”.
Cronológicamente el 22 de mayo, el Papa Francisco recibió de parte del Director
de la Película y productores asociados, una copia de este filme. Nosotros en Radio
Vaticano sentimos más que oportuno en el Año de la Fe, atraer a nuestros micrófonos
la presencia de estos españoles que han hecho posible que la historia de los 51 mártires
de Barbastro, España, pueda ser conocida, difundida y meditada.
Este singular
cometido ha sido facilitado el mismo 22 de mayo por la tarde gracias al padre José-Félix
Valderrábano Ordeig, Secretario general de la Congregación de los Misioneros Hijos
del Corazón Inmaculado de María. En el audio que acompaña esta presentación les proponemos
el parecer de nuestros invitados por orden de aparición: Pablo Moreno, Director Cinematográfico,
Jacobo Muñoz Actor Protagonista en el papel de “Eugenio Sopena”, líder CNT Barbastro,
el padre Manolo Tamargo Padre Provincial en Aragón, que gestionó la elaboración de
este filme, y por supuesto el artífice de que este encuentro se hiciera posible, el
Padre José-Felix Valderrábano promotor no solo de esta realización cinematográfica
sino también -cuando era Provincial de Aragón-, de la publicación del libro “Esta
es nuestra Sangre” que narra fehacientemente la historia de los Mártires claretianos
de Barbastro y cuyo autor es el Padre Gabriel Campo, también claretiano; del trabajo
en el proceso de beatificación de estos mártires (el 25 de octubre de 1995, por Juan
Pablo II), e impulsor del museo que actualmente existe en Barbastro y en el que se
pueden apreciar los fugaces y dolorosos escritos que estos hombres de fe, casi todos
jóvenes, nos dejaron. En el estudio 3 de Radio Vaticano también estaba presente Joaquín
Fuentes, un actor dramático que nos confesó su desmedido amor por el cine, pero que
silencioso y sonriente siguió el curso de esta entrevista sin pronunciar palabra.
Buena sintonía. Patricia L. Jáuregui Romero @pjuregui - Radio Vaticano