Papa Francisco anunció su peregrinación al Santuario de la Virgen de Bonaria
(RV).- (Con Audio) En la Plaza de San Pedro, ante casi cien mil fieles de tantas partes
del mundo, saludando a numerosos peregrinos de la isla italiana de Cerdeña, el Obispo
de Roma anunció entre grandes aplausos el anhelo de visitar el Santuario de Nuestra
Señora de Bonaria, señalando que será probablemente el próximo mes de septiembre.
El Papa Francisco explicó los antiguos lazos que unen Buenos Aires con esta antigua
advocación mariana: (Audio)
(CdM – RV)
La
Ciudad Natal de Papa Francisco se llama así por la devoción del fundador a Nuestra
Señora de Bonaria de Cerdeña.
En la primera fundación Pedro de Mendoza
llamó al sitio Real de Nuestra Señora Santa María del Buen Ayre para cumplir la promesa
que hiciera a la Patrona de los Navegantes que se hallaba en la Cofradía de los Mareantes
de Triana y de la que él era miembro. En efecto, “Buen Ayre” era la castellanización
del nombre de la Virgen de Bonaria, es decir, de la Virgen de la Candelaria a quien
los padres mercedarios habían levantado un santuario para los navegantes en Cagliari,
Cerdeña, y que era venerada también por los navegantes de Cádiz, España
Cuenta
la historia que en 1370 arribó a las playas de esta ciudad de Cerdeña, una caja que
contenía la imagen de una virgen que llevaba al niño Jesús en un brazo, y en el otro,
un cirio. Desde entonces fue venerada como la virgen de los navegantes y se la llamó
Bonaria, o del Buen Aire.
Llegó a España de la mano de los marineros y fue
allí donde se popularizó su culto, especialmente en el puerto de Sevilla, desde donde
partían las expediciones hacia las nuevas conquistas.
Así llegó al Río de la
Plata traída por dos sacerdotes que formaron parte del grupo comandado por don Pedro
de Mendoza quien llevado por su devoción a la virgen, decidió honrarla otorgándole
su nombre a la ciudad fundada. Por eso Buenos Aires fue llamada “Puerto de Nuestra
Señora Santa María del Buen Aire”.