(RV).- (audio) Francisco celebró la
Misa en la Cena del Señor, que conmemora la institución de la Eucaristía y del sacerdocio,
en la cárcel de menores de Casal del Marmo, en las afueras de Roma. Una misa que normalmente
presidía el Pontífice en la basílica de san Juan de Letrán, catedral de Roma.
Sobre
la misa y en particular sobre el lavatorio de los pies oigamos la crónica del padre
Lombardi que estaba presente en la ceremonia.
Fue uno de estos momentos que
no se olvidan, llenos de gran emoción y caridad. Asistieron a la ceremonia litúrgica
unas 120 personas, por supuesto, sobre todo jóvenes del Instituto, que eran unos
cincuenta muchachos, y con ellos representantes de las distintas categorías del personal
del reformatorio que los siguen de diversas maneras.
Por lo que se refiere
a la liturgia de la Cena del Señor, después de las lecturas, hubo una breve homilía
del Santo Padre. Una homilía que fue prácticamente una introducción al gesto del lavatorio
de los pies, como modelo de amor y de servicio.
El momento del lavatorio de
los pies fue realmente muy impresionante. El Papa se acercó a la primera fila de los
jóvenes. Había 12 jóvenes, entre ellos un par de los musulmanes y entre ellos también
dos chicas y, por lo tanto, representaban en cierto modo las distintas nacionalidades
y confesiones de los jóvenes que viven en el Instituto.
El Papa se arrodilló
con ambas rodillas en el suelo, seis veces porque cada vez lavó los pies de los dos
jóvenes que estaban cerca. Y el Papa les lavó los pies vertiendo el agua, luego secándolos
y finalmente besando uno de los pies de cada uno de los doce jóvenes a los que hizo
este maravilloso acto de servicio. Fue un acto y un momento muy conmovedor... y también
muy comprometido porque el Papa estaba de rodillas, con ambas rodillas en el suelo.
Fue
una ceremonia muy sencilla, por el deseo y voluntad expresada por el mismo Pontífice,
que concelebró la misa junto al Cardenal Vicario Agostino Vallini y al padre Gaetano
Greco, capellán del reformatorio. Ayudaron en la celebración eucarística dos diáconos,
y dos jóvenes del Seminario Romano.