Se celebraron las exequias del Cardenal Cheli, quien vivió según las Bienaventuranzas
evangélicas
(RV).- (Con audio) Se celebraron el sábado
9 de febrero por la tarde, en la Basílica de San Pedro las exequias del Cardenal Giovanni
Cheli, Presidente emérito del Consejo pontificio para la Pastoral de los emigrantes
e itinerantes, fallecido el día anterior en Roma a la edad de 94 años. Presidió la
ceremonia, el Cardenal Angelo Sodano, Decano del Colegio cardenalicio en nombre del
Papa quien en un mensaje a la diócesis italiana de Asti recuerda al Purpurado como
“pastor fiel al Evangelio y a la Iglesia”, que gastó su vida "en adhesión coherente
y generosa a su propia vocación”.
Las Bienaventuranzas evangélicas fueron
"las estrellas inspiradoras de su larga existencia”, surco en el que se ve el testimonio
y el mensaje dejado por el Cardenal Cheli, tal como afirmó el Cardenal Sodano en su
homilía, en la que también recordó el servicio que el Purpurado realizó a favor de
los que sufrían en tiempo de guerra. De hecho, en la diócesis de Asti, donde había
sido ordenado sacerdote – recordó el Cardenal Decano – “se hizo famoso por su obra
de caridad en el año 1945, hasta el fin de la segunda guerra mundial, cuando con el
Obispo Mons. Umberto Rossi, organizó la Pontificia Obra de Asistencia”.
“Con
particular ardor – añadió el Cardenal Sodano – se prodigó para ayudar a los prisioneros
de guerra, que enfermos y perdidos regresaban a la patria”. Tras este empeño de caridad,
de paz y de reconciliación entre los pueblos siguió su trabajo en la nunciatura, tanto
en Guatemala come en España e Italia. “También fue así – concluyó el Decano del Colegio
cardenalicio – en su largo servicio a la Santa Sede en la Secretaría de Estado, en
Nueva York ante Naciones Unidas y, en fin, nuevamente en Roma al servicio de los
emigrantes”.
(María Fernanda Bernasconi – RV).
Murió el Cardenal
Cheli: Pastor fiel al Evangelio y a la Iglesia, telegrama del Papa
(RV).-
Benedicto XVI expresó su pesar ante la noticia del fallecimiento del Cardenal Giovanni
Cheli, recordando gratamente la preciosa y solícita colaboración que este purpurado
brindó durante tantos decenios a la Sede Apostólica, en las representaciones pontificias,
en la Secretaría de Estado, como Observador de la Santa Sede en Naciones Unidas y
como presidente del Pontificio Consejo para la Pastoral de los Migrantes e Itinerantes.
El
Cardenal Giovanni Cheli deja el testimonio de una vida dedicada a su adhesión coherente
y generosa a su propia vocación, como sacerdote solícito hacia las necesidades de
los fieles, en especial hacia la formación cristiana de la juventud, escribe Benedicto
XVI en su telegrama de condolencias, enviado al Obispo de Asti, Mons. Francesco Ravinale.
El Santo Padre uniéndose a la tristeza de esta comunidad diocesana, que abraza al
purpurado fallecido entre sus hijos más ilustres, así como a los familiares del Card.
Cheli, asegura sus fervientes oraciones de sufragio, para que el Señor reciba en el
gozo y en la paz eterna a este celoso Pastor, fiel al Evangelio y a la Iglesia.
El
cardenal Giovanni Cheli tenía 94 años de edad y falleció anoche en Roma Con su
muerte, el Colegio Cardenalicio queda integrado por 209 miembros de los que 118 son
electores.
Las exequias del Cardenal Giovanni Cheli, quien era Presidente emérito
del Consejo pontificio de la Pastoral para los Migrantes e Itinerantes, se celebrarán
mañana, a las cinco de la tarde, en la Basílica de San Pedro.