La Iglesia en Puerto Rico: "500 años. Tengan fe, tengan agradecimiento"
(RV).- (AUDIO) Este lunes tuvo lugar la Conmemoración del V Centenario de la fundación
de la Iglesia Católica en Puerto Rico y la llegada de don Alonso Manso, primer obispo
de Puerto Rico y de toda América. Con nosotros el secretario de la Conferencia Episcopal
puertorriqueña, Mons. Daniel Fernández Torres, quien nos habla al respecto.
Mons. ¿Cómo
fueron las celebraciones de este Centenario que tuvieron lugar el lunes?
¿Desde cuando
comenzaron los preparativos y las celebraciones de este V Centenario de Fundación
de la Iglesia Católica?
Por último
¿Cuáles son los desafíos que afronta la Iglesia puertorriqueña hoy día? (PY-RV)
TEXTO Mensaje del Obispo de Arecibo, Monseñor Daniel Fernández Torres, para el Día
de Acción de Gracias de 2012
“¡Tengan fe! ¡Tengan agradecimiento!”
En
este Día de Acción de Gracias quisiera hacerme eco de las palabras que el Beato Juan
Pablo II dirigió a los agricultores italianos en su celebración de Acción de Gracias
del 9 de noviembre de 1980 y que se adecuan perfectamente al contexto del Año de la
Fe que estamos celebrando: “¡Tengan fe! ¡Tengan agradecimiento!” Ése día, el Santo
Padre dirigió la homilía hacia lo que él mismo describió como “dos reflexiones de
importancia fundamental”: el valor de la fe cristiana y la gratitud en medio del dolor.
Sobre la primera, reconoció que el agradecimiento a Dios nace de la fe, por lo que
pidió que “¡estimen su fe! ¡Mantengan firme su fe!”.
“Hoy hay necesidad de
una fe iluminada, convencida, profunda. Es necesario estar preparados para responder
de modo adecuado a los interrogantes que la sociedad moderna plantea continuamente,
y acaso violentamente, para no ceder jamás al choque de las mentalidades diversas
y contrastantes; es necesario actualizar y desarrollar la propia cultura religiosa”,
dijo. Entonces, exhortó a que, “especialmente en los períodos de relativa calma
de los trabajos”, frecuentemos los encuentros formativos en las parroquias y meditemos
la Palabra de Dios. “¡Inmensa es su dignidad y responsabilidad de cristianos! Efectivamente,
‘ustedes —continúa el Apóstol [San Pedro]— son linaje escogido, sacerdocio real, nación
santa, pueblo adquirido para pregonar el poder del que los llamó de las tinieblas
a su luz admirable’”, prosiguió. Acto seguido, explicó que la actitud de agradecimiento
debe distinguir la vida de cada hombre y de cada cristiano en particular, “incluso
en los momentos de ansiedad y de dolor”: “San Pablo inculcaba en sus Cartas este continuo
espíritu de gratitud: ‘Den en todo gracias a Dios, porque tal es su voluntad en Cristo
Jesús’ (1 Tes 5, 18)”. “Es una actitud ‘eucarística’, que les da paz y seguridad
en las fatigas, los libera de toda afección egoísta e individualista, los hace dóciles
a la voluntad del Altísimo, incluso en las exigencias morales más difíciles, los abre
a la solidaridad y a la caridad universal; los hace comprender cómo es absolutamente
necesaria la oración, y sobre todo la vida eucarística mediante la Santa Misa… ¡Agradecer
significa creer, amar, dar! ¡Y con alegría y generosidad!”, resumió. Que este
Día de Acción de Gracias sea una ocasión para tener fe, renovando nuestro compromiso
con el Padre Bueno a través de la asistencia a la Misa en familia, y que sea esa misma
confianza en Dios la que nos lleve a dar gracias a Dios en todo, aún en los momentos
más difíciles de nuestra vida. Con mi bendición y felicitación, + Daniel Fernández
Torres Obispo de Arecibo Fuente: Conferencia Episcopal de Puerto Rico