Nuevo Presidente de la Conferencia Episcopal de Guatemala y luto por el asesinato
de un sacerdote
(RV).- “Cristo Jesús nuestra esperanza”, el tema del mensaje de la Conferencia Episcopal
de Guatemala cuyo nuevo presidente es Mons. Rodolfo Valenzuela Núñez, Obispo
de Verapaz hecho público el pasado 27 de enero al concluir la Asamblea Plenaria Anual.
El mensaje consta de 7 puntos concernientes a la nueva evangelización y a la Misión
continental lanzada en Aparecida; el tema de la formación de sacerdotes, el análisis
de la sociedad actual guatemalteca y la confianza en el futuro con los ojos puestos
en Dios.
En el apartado 6 de este mensaje destacan la preocupación de la Conferencia
Episcopal sobre las condiciones de la sociedad guatemalteca enfatizando dos grandes
retos que a nuestro juicio enfrenta Guatemala: la pobreza y la violencia. “Pensamos
que los Acuerdos de Paz siguen siendo herramientas con que trabajar los grandes temas
nacionales”. Explican que más de la mitad de los ciudadanos viven en pobreza, hay
una falta de desarrollo rural integral por el que clama el país. La institución familiar
se ha debilitado por la migración así como por el deterioro de la vivencia de los
valores morales en la cultura. El narcotráfico mina los valores de la convivencia.
La violencia y la inseguridad son manifestación de estas disfunciones sociales. Aludiendo
a la visita realizada por el Presidente de la República destacan haberle manifestado,
la propia convicción de que la inseguridad y la violencia se combaten atacando a las
raíces y causas que las provocan y no solamente a sus manifestaciones. “Estas causas
son la falta de ética y moral tanto en la gestión pública como en las acciones de
los ciudadanos que últimamente se enraízan en la idolatría al dinero, al poder y al
placer. Nuestra propuesta ya expuesta en la carta pastoral “Construir en justicia
inspirados por Dios” –escriben- plantea los principios fundamentales: el respeto
a la persona como fundamento de una ética política y social, la búsqueda del bien
común como criterio moral para discernir la bondad o maldad en las decisiones gubernamentales,
empresariales y ciudadanas, el principio del destino universal de los bienes, tal
como se entiende en la Doctrina Social de la Iglesia, y como norma de la administración
de los bienes temporales y el principio de la subsidiariedad. Estos son los criterios
que deben ser tomados en cuenta como guías éticas en la gestión pública”. Confiados
en el futuro con los ojos puestos en Dios y su Hijo Jesucristo, los obispos guatemaltecos
invocan a la Virgen del Rosario, patrona del País para que interceda por su pueblo.
Nota luctuosa sacude a la Iglesia local: Mientras los Obispos
se encontraban reunidos en su Asamblea plenaria anual la mañana del 27 de enero la
Iglesia guatemalteca se vistió de luto por el asesinato del sacerdote David Donis
Barrera, de 60 años, perteneciente a la comunidad del Santa Rosa, que viajaba
con el sacristán de la Parroquia de La Sagrada Familia, Vicente Donis Barrera
que resultó ileso. El padre David brutalmente asesinado en el kilómetro 52 de la
carretera entre la frontera con El Salvador acababa de celebrar la Santa Misa, y
se dirigía a la ciudad de Guatemala, donde se verificó un accidente automovilístico.
El conductor del otro vehículo dio alcance al del sacerdote, quienes en represalia
por lo ocurrido dispararon a ráfaga contra el sacerdote. Guatemala, con 14,3 millones
de habitantes y un promedio de 16 asesinatos diarios, es uno de los más violentos
del Latinoamérica. En 2011 fueron asesinadas unas 6.000 personas. (PLJR – RV)