Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, del 18 al 25 de enero
Lunes, 16 ene (RV).- “Todos seremos transformados por la victoria de nuestro Señor
Jesucristo”, es el tema de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, del
18 al 25 de enero próximo, promovida por el Consejo Mundial de Iglesias, una comunidad
mundial de 349 iglesias que buscan la unidad, el testimonio común y el servicio y
que con esta iniciativa propician el que muchos cristianos tomen conciencia de la
gran diversidad de formas de adorar a Dios. Durante este período, se intercambian
los púlpitos y se organizan oficios ecuménicos especiales. Cada año, se pide a los
asociados ecuménicos de una región concreta que preparen un texto sencillo sobre un
tema bíblico. Después, un grupo internacional de participantes patrocinados por el
Consejo Mundial de Iglesias: protestantes, ortodoxos y católicos romanos edita este
texto y se asegura de que está relacionado con la búsqueda de la unidad de la iglesia.
El texto es publicado conjuntamente por el Pontificio Consejo para la Promoción
de la Unidad de los Cristianos y el Consejo Mundial de Iglesias, a través de su Comisión
de Fe y Constitución, que también acompaña todo el proceso de producción del texto.
El material final es enviado a las iglesias miembros y las diócesis católicas romanas,
a quienes se invita a que traduzcan el texto y lo contextualicen para su propio uso.
La Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos 2012 reflexiona sobre lo que
la victoria significa para la unidad.
El tema, "Todos seremos transformados
por la victoria de nuestro Señor Jesucristo”, se basa en la primera epístola del apóstol
Pablo a los corintios (1 Cor 15:51-58), en la que se promete la transformación de
la vida humana, con toda su dimensión aparente de “triunfo” y “derrota”, a través
de la victoria de la resurrección de Cristo. Celebrada tradicionalmente del 18 al
25 de enero (en el hemisferio norte) o en torno a Pentecostés (en el hemisferio sur),
la semana de oración moviliza a innumerables congregaciones y parroquias de todo el
mundo. Durante esa semana, los cristianos de diferentes familias confesionales se
reúnen y –al menos en esa ocasión– oran juntos en celebraciones ecuménicas especiales. (PLJR
– RV)