“El respeto del ser humano y de la naturaleza son una sola cosa”
Lunes, 28 nov (RV).- El Papa exhorta a los jóvenes participantes en el encuentro de
la Fundación italiana Sorella Natura “a respetar el ambiente para asegurar un futuro
mejor”. Pasado el mediodía, Benedicto XVI ha recibido en el Aula Pablo VI del Vaticano
a unos 7 mil jóvenes estudiantes que han participado en el encuentro de la Fundación
italiana Sorella Natura (hermana naturaleza).
El Santo Padre ha agradecido
a los jóvenes su presencia en el Vaticano y ha dicho que apreciaba mucho su compromiso
con la naturaleza y su opción de ser “custodios de lo creado”. Ha recordado también
el Papa que la Fundación tiene una profunda inspiración franciscana y que se ha elegido
la fecha de hoy, memoria de la proclamación de san Francisco de Asís como patrono
de la ecología, por parte de Juan Pablo II en 1979. Asimismo ha recordado el Papa
que a declararlo patrono de Italia fue en Pío XII, en 1939, cuando lo definió “el
más italiano de los santos, y el mas santo de los italianos”.
Benedicto XVI
ha señalado a los muchachos y muchachas que uno de los primeros textos literarios
que se estudia y que se lee en las antologías italianas es el “Cántico del hermano
Sol o cántico de las criaturas”, de San Francisco de Asís.
Este cántico
pone en luz el justo lugar de dar al Creador, Aquel que ha llamado a la existencia
a toda la gran sinfonía de las criaturas…”tuyas son las alabanzas, la gloria y el
honor y toda bendición…Alabado seas, mi Señor, con todas Tus criaturas”. Estos versos
forman parte justamente de vuestra tradición cultural y escolástica. Pero son sobre
todo una oración, que educa el corazón, en el diálogo con Dios: lo educa a ver en
toda criatura la huella del gran Artista celestial.
“Fray Francisco, fiel a
las Sagradas Escrituras -ha explicado Benedicto XVI- nos invita a reconocer en la
naturaleza, un libro estupendo, que nos habla de Dios, de su belleza y de su bondad”.
Y la Iglesia, nunca ha olvidado que respetando la huella del Creador en todo lo creado,
se comprende mejor nuestra verdadera y profunda identidad humana.
Si en su trabajo,
el hombre olvida que es un colaborador de Dios, puede hacer violencia a lo creado
y provocar daños que tienen siempre consecuencias negativas incluso en el hombre,
como vemos en tantas ocasiones, desgraciadamente. Hoy más que nunca, es evidente,
que el respeto por el ambiente no puede olvidar el reconocimiento del valor de la
persona humana y de su inviolabilidad, en cada fase de la vida y en cualquier condición.
El respeto por el ser humano y el respeto por la naturaleza forman una sola cosa,
pero ambos pueden crecer y tener su justa mesura si respetamos, en la criatura humana
y en la naturaleza, al Creador y a su creación.
El Papa ha tenido unas
palabras también para los profesores y autoridades presentes.
Es evidente,
que en la tierra, no hay un futuro bueno para la humanidad, si no nos educamos todos
a emprender un estilo de vida más responsable frente a lo creado. Y este estilo se
aprende ante todo en la familia y en la escuela. Animo, pues, a los padres a los responsables
escolares y a los profesores a llevar adelante, con empeño, una constante atención
educativa y didáctica con este sentido. ER