La Iglesia africana debe ser autosuficiente desde el punto de vista económico

Martes, 1 nov (RV).- Que la Iglesia africana envíe a misioneros a todo el mundo para fomentar la evangelización: es la exhortación que resuena estos días en Nairobi, Kenia, donde hasta el 3 de noviembre tiene lugar el encuentro de las Sociedades misioneras pontificias (SMP) del África anglófona. El tema del Congreso es “Cómo hacer que la Iglesia católica en África se oriente más al sentido misionero a la luz de la nueva evangelización”. Entre los misioneros participantes provenientes de 13 países, se encuentra el padre Timothy Lehane Barrett, secretario general de la Pontificia Obra de la Propagación de la Fe, quien recordó que “el Santo Padre siempre tiene presente el continente africano para el envío de misioneros al mundo. Desde Pablo VI a Benedicto XVI, pasando por Juan Pablo II, los pontífices han pedido siempre a las iglesias africanas que potencien esta misión”. En este sentido, el padre Lehane añade que “el crecimiento de cristianismo y el catolicismo en África ha aumentado un 18 por ciento en los últimos 50 años. Y de esta forma, hoy hay muchos jóvenes que nos animan a proseguir con la misión”.

Por otra parte, continúa el secretario general, “la Iglesia en África debe considerarse como Iglesia evangelizadora para evangelizar a su vez, al resto del mundo. Reconociéndose a sí misma como un don para el mundo, conseguirá que también los africanos animen con alegría las demás iglesias del planeta”. El padre Lehane exhorta a la Iglesia africana a ser autosuficiente desde el punto de vista económico y buscar la forma de ser independiente, porque las contribuciones en metálico de los cristianos europeos han disminuido.

No obstante, explica el religioso, la autosuficiencia no será un problema porque “los cristianos, incluso cuando son pobres, siempre están dispuestos a donar”. De importancia fundamental en este sentido es la invitación a compartir las experiencias e ideas entre las distintas sociedades pontificias misioneras africanas: “una de los aspectos más importantes- concluye el padre Lehane- es que los directores de las SMP no se consideren individuos aislados, sino como miembros de una familia universal, animadores misioneros del Santo padre en sus respectivas diócesis. Esto les dará el valor necesario para llevar adelante su obra”. Por su parte el padre George Ajana, director de la SMP en Nigeria, insistió en la necesidad de crear una mayor conciencia acerca de la existencia y la actividad de las sociedades misioneras pontificias, porque “muchas personas, incluidos algunos sacerdotes, religiosos y laicos, nunca han oído hablar de ellas”.

Por último Paolo Nganga’, coordinador del sector del planificación y desarrollo de la Universidad católica de África oriental, ha alertado sobre las donaciones provenientes de individuos o entes con valores contrarios a los de la Iglesia: “No comprometáis –dijo a los participantes- la misión, la visión objetiva y los objetivos de vuestras organizaciones”.

CVV