El Derecho natural y el del Evangelio abrazan una información profunda, universal
y humanista. Visita y gratitud del Papa al diario vaticano
Martes, 5 jul (RV).- L’Osservatore Romano profundiza en las realidades, aun las más
lejanas y pequeñas, impulsando la justicia y la esperanza. Información humanista y
universal arraigada en la fe en la bondad de Dios. Palabras y agradecimiento de Benedicto
XVI en la sede de este periódico.
Un observatorio desde Roma, que profundiza
en las realidades, aun las más lejanas y pequeñas, impulsando la justicia y la esperanza.
Información humanista y universal arraigada en la fe en la bondad de Dios. Son algunas
de las características que destacó esta mañana Benedicto XVI de L’Osservatore Romano,
visitando la sede de este periódico que ha cumplido 150 años.
Tras desear un
feliz cumpleaños a este medio de información que desde el Vaticano propaga el magisterio
pontificio, desde hace un siglo y medio y que informa sobre las realidades del mundo,
sin olvidar los lugares que pueden parecer más pequeños, pero que no son menos importantes,
el Santo Padre señaló que más allá de las conmemoraciones particulares y solemnes,
había querido estar con los que trabajan cada día en este periódico y lo ‘hacen’ concretamente,
con pasión humana y cristiana y con profesionalidad.
Contando que tenía
mucha curiosidad por conocer cómo se realiza un periódico, hoy con los medios modernos,
y destacando, como pudo comprobar, que un diario exige «mucha más creatividad humana
que trabajo técnico», pues impulsa el pensamiento y la reflexión, el Papa se refirió
a este medio informativo como a un gran observatorio - como dice su mismo nombre –
que sirve para ver las realidades de este mundo e informar sobre ellas. Tanto las
lejanas como las que están cerca, reiteró Benedicto XVI, citando los ejemplos de las
informaciones referidas a Filipinas, Australia, América Latina y agradeciendo el trabajo
realizado por L’Osservatore Romano:
«Aquí se ve
algo que coincide con el urbis et orbis, que es característica de la catolicidad,
en cierto sentido también como herencia romana: realmente, ver al mundo y no sólo
a sí mismos».
Cosas que están lejos, también en otro sentido, señaló el
Santo Padre, pues L’Osservatore Romano no se queda en la superficie de los eventos.
Es también una revista cultural:
«Admiro cómo
es posible que nos den cada día grandes contribuciones que nos ayudan a comprender
mejor al ser humano, las raíces de donde vienen las cosas y donde se comprenden, realizan
y trasforman».
Refiriéndose a los dos lemas al pie del nombre de este
periódico, que sintetizan los criterios de la información. Por un lado el gran Derecho
romano, el derecho natural – el sentido de justicia – y por otra el Evangelio:
«Se podría
decir también, que con estos dos criterios – el Derecho natural y el del Evangelio,
tenemos como criterio la justicia y la esperanza que viene de la fe. Estos dos criterios
juntos – la justicia que respeta a cada uno y la esperanza que ve también las cosas
negativas a la luz de una bondad divina, de la cual estamos seguros por la fe – ayudan
a dar realmente una información humana, humanista. Humanista en el sentido de humanismo
que tiene sus raíces en la bondad de Dios. Por lo que no es sólo ‘información, sino
realmente ‘formación’ cultural. Por todo ello os agradezco».