Europa, Camino de Santiago, y defensa de la dignidad humana, ejes del viaje
Viernes, 5 nov (RV).- El Papa Benedicto
XVI dentro de pocas horas llegará a España, como peregrino a Santiago de Compostela
y como pastor que consagrará el templo de la Sagrada Familia en Barcelona, para continuar
dando el mensaje de lo importante que es para la Iglesia la conservación y protección
de la institución familiar. En ambas ciudades ya los preparativos están en sus últimos
detalles, y si bien algunos medios han querido dar relevancia a pequeños grupos que
legítimamente pueden manifestar su desacuerdo con la visita, las grandes mayorías
católicas ofrecerían un caluroso abrazo al Pontífice peregrino.
Este viaje
de Benedicto XVI, el décimo octavo internacional, se entiende desde tres ejes que
son fundamentales. El primero es Europa y el Camino de Santiago, ya que sabemos la
gran preocupación que tiene el Papa de que sean reconocidas las raíces cristianas
de este continente, en especial cuando se recuerda que fue en la Catedral de Santiago
cuando en el año de 1982 el Papa Juan Pablo II le pidió a la gente de este continente
que recordara sus raíces cristianas. Y el Camino de Santiago es el símbolo de la peregrinación
en la fe que nos lleva a unirnos más al Señor. La segunda clave es la familia, que
en el maravilloso templo proyectado por Gaudí, le ofrecerá al Santo Padre una nueva
oportunidad para reafirmar el valor que ella tiene para la vida cristiana. La tercera
clave de este viaje está conectada con la anterior, ya que tiene que ver con la defensa
de la dignidad de la persona humana, que se pondrá de manifiesto en la visita al Hogar
de atención infantil “Nen Déu”, Niño Dios, donde un grupo de religiosas y laicos comprometidos
atienden a niños con discapacidades mentales.
El padre David Gutiérrez conversó
sobre este nuevo viaje de Benedicto XVI y el papel de los medios de comunicación con
Isidro Catela, responsable del departamento de Información de la Conferencia Episcopal
española para el viaje del Papa.