Editorial ‘Octava dies’: «El Papa, el pueblo y la caridad»
Viernes, 5 nov (RV).- El padre Federico Lombardi dedica su editorial para el informativo
semanal del Centro Televisivo Vaticano – Octava Dies – al XVIII Viaje Apostólico internacional
del Pontificado de Benedicto XVI a Santiago de Compostela y a Barcelona. Viaje que
- como el mismo Santo Padre dijo, invitando a que se acompañe con la oración - realiza:
«como testigo de Cristo Resucitado, con el deseo de llevar a todos su palabra, en
la que pueden encontrar luz para vivir con dignidad y esperanza para construir un
mundo mejor». «Hay infinidad
de cosas bellísimas que se pueden decir sobre este viaje del Papa a España. Quisiéramos
recordar dos aspectos, para que no queden en la sombra. Santiago es meta de un pueblo
numeroso que se pone en camino, en humildad y en búsqueda. Innumerables itinerarios
de personas a través de los siglos, que reflexionan, rezan, fatigan para encontrarse
a sí mismas y encontrar a Dios. Infinitas vivencias distintas de vida, con su secreto
y su misterio profundo, concluyen en el gran río del pueblo en camino. El Papa hoy
es peregrino con los peregrinos, él como persona, él como pastor. Cuántas personas
vagan sin encontrar la dirección y la meta. Rumbo a Santiago el camino de muchísimos
ha encontrado una estrella, una meta. Junto con el Papa afrontemos confiados nuestros
caminos. También la construcción de la Sagrada Familia es una
empresa de un pueblo humilde y numeroso. Es este pueblo el que la hace crecer lentamente
con sus pequeñas contribuciones y su devoción. No los poderes de este mundo. Gaudí
permanece como el alma de esta empresa, pero ella va más allá de su obra, más allá
del tiempo, así como en las expresiones artísticas, aun conservando su inspiración
tan poderosa de fe y de arte. Así crece la casa donde el pueblo
creyente se reencuentra a sí mismo, en su encuentro con Cristo, con Dios. Pero en
los muros exteriores cada hombre, aun no creyente, puede leer los significados más
profundos de la vivencia humana. Lenguaje universal de anuncio de salvación. Aquí
el Papa ha querido venir a rezar con el pueblo. Y luego, el
encuentro con los pequeños y los que sufren, el domingo por la tarde. No puede faltar.
No existe comunidad creyente sin amor activo, capaz de transformar, transfigurar el
sufrimiento en esperanza y en alegría. La caridad vivida es la estrella del camino,
la lengua cotidiana que todos pueden entender. Por aquí pasa necesariamente el camino
del Papa».