Ángelus: la Asamblea Especial para Oriente Medio del Sínodo de los Obispos y la Jornada Misionera Mundial invitan a contemplar la Iglesia como misterio de comunión

Domingo, 24 oct (RV).- La Asamblea Especial para Oriente Medio del Sínodo de los Obispos y la Jornada misionera Mundial que celebramos hoy y que se centra en el tema: “La construcción de la comunión eclesial es la clave de la misión”, han sido los dos temas centrales de la alocución previa al Ángelus del Santo Padre.

Benedicto XVI ha hecho notar la similitud de los temas de estos dos acontecimientos eclesiales a los que se ha referido durante la oración mariana y cómo ambos nos invitan a contemplar la Iglesia como misterio de comunión. “Por esta razón –ha explicado el Pontífice- la próxima Asamblea General ordinaria del Sínodo de los Obispos, en 2012, será dedicada al tema ‘La nueva evangelización para la transmisión de la fe cristiana’”.

Citando al teólogo italo-alemán Romano Guardini, Benedicto XVI ha subrayado que “la realidad Iglesia implica toda la plenitud del ser cristiano que se desarrolla en la historia en cuanto ésta comprende la plenitud de lo humano que se relaciona con Dios”

“También los cristianos de hoy muestran que la vida es maravillosa y extraordinaria su vida asociada. Transcurre su existencia terrena, pero son ciudadanos del cielo. Obedecen a las leyes establecidas, pero con su forma de vida van más allá de las leyes. Están condenados a morir, pero de ello extraen la vida. Incluso haciendo el bien, son perseguidos y aumentan numéricamente día a día”

Finalizado el rezo mariano, el Papa se ha dirigido como es habitual a los miles de peregrinos reunidos en la Plaza de san Pedro en distintas lenguas. Como siempre les ofrecemos las palabras del Santo Padre en español.

Saludo con afecto a los peregrinos de lengua española presentes en esta oración mariana, en particular a los fieles peruanos y de otros países latinoamericanos de la Hermandad del Señor de los Milagros, de Roma. En este domingo, la Iglesia celebra la Jornada Mundial de las Misiones. Invito a todos a orar al Señor por aquellos que han entregado generosamente su vida a la evangelización de los pueblos, a menudo entre grandes dificultades. Confío a todos los misioneros del mundo a la protección maternal de la Santísima Virgen María, que en el transcurso de este mes invocamos especialmente con el título de Nuestra Señora del Rosario, para que no les falte nunca nuestro apoyo espiritual y material en el desempeño de su hermosa tarea apostólica. Feliz domingo