Sínodo: el futuro de los cristianos en Oriente Medio

Lunes, 18 oct (RV).- Esta mañana la décimo primera Congregación General para Oriente Medio del Sínodo de Obispos. Los padres sinodales celebran su Asamblea en el Aula Nueva del Sínodo desde la Semana pasada. El informe de nuestro enviado:
 
La Asamblea Especial para Oriente Medio del Sínodo de los Obispos reinició sus trabajos la mañana de este lunes 18 de octubre con la presentación de la “Relatio post Disceptationem”, la relación posterior a la discusión. El Papa Benedicto XVI presidió la Congregación General que comenzó con el canto de la hora tertia siguiendo el rito Caldeo.
 
La relación posterior a la discusión fue presentada por el relator general de Sínodo, su Beatitud Antonios Naguib. El amplio escrito está articulado en tres grandes bloques, con una introducción, una conclusión y termina con el planteamiento de 23 interrogantes que serán retomadas por los padres sinodales para ser discutidas y respondidas en los círculos menores, y a la vez sirvan de base para la elaboración de las proposiciones. El primer gran bloque lleva por titulo “La presencia de los cristianos en Oriente Medio”, en donde se plantea el aspecto apostólico de la comunidad que vive en un territorio apostólico, y que por las mismas palabras de Jesús, tiene una llamada a la misión, a llevar el evangelio a todas las gentes. En este primer apartado se menciona que los cristianos en Oriente Medio son “ciudadanos indígenas” en el sentido que ellos también son originarios de esas tierras y pertenecen al tejido social y a la identidad misma de sus respectivos países. El segundo gran bloque se refiere a la Comunión Eclesial, referida no solo a los aspectos internos de los miembros de las comunidades eclesiales de Oriente Medio, sino también plantea los aspectos de la comunión entre las distintas Iglesias y comunidades eclesiales, lo que el mismo texto llama ecumenismo “ad extra”. El ultimo bloque o apartado lleva por titulo “Testimonio Cristiano: testigo de la resurrección y del amor”, que además de recordar los orígenes bíblicos del testimonio de los apóstoles en la resurrección, y de sus sucesores y comunidades, habla también de la catequesis, de la liturgia, de las relaciones con los judíos y con los musulmanes, invitando a todos a construir juntos una ciudad de comunión afrontando los dos grandes desafíos, la paz y la derrota de la violencia.
 
La conclusión de la relación después de la discusión parte de una pregunta, “¿qué futuro espera a los cristianos en Oriente Medio?”, a la que responde con las palabras de Jesús reportadas en el evangelio según san Lucas, “no temas, pequeño rebano”, planteando que los contextos actuales son fuentes de dificultades y preocupaciones, pero animados por el Espíritu Santo y guiados por el Evangelio, con la confianza puesta en Dios, esperan que su comportamiento y su testimonio puedan hacer de los cristianos una realidad que cuenta.
 
Los trabajos de la Asamblea Especial para Oriente Medio del Sínodo de los obispos continuará la tarde de este lunes con el trabajo en grupos, los llamados círculos menores.
 
Desde el Aula Nueva del Sínodo en el Vaticano, David Gutiérrez