Cristianos y musulmanes, juntos para vencer la violencia
Viernes, 27 ago (RV).- “Cristianos y musulmanes: juntos para vencer la violencia entre
fieles de religiones diferentes”. Es el mensaje enviado por el dicasterio del Papa
para el diálogo interreligioso, con motivo de la conclusión del Ramadán, que se ha
hecho público este viernes.
Dirigiéndose a los queridos amigos musulmanes,
también este año, el presidente y el secretario del Pontificio Consejo para el Diálogo
Interreligioso, el Card. Jean Louis Tauran y el arzobispo Pier Luigi Celata, firman
este mensaje, con los mejores deseos de paz y alegría y con el anhelo de que Dios
premie los esfuerzos, que han realizado en el mes que han dedicado a rezar, ayunar
y ayudar a los más necesitados.
Espiritualmente cercanos, junto con los creyentes
de otras religiones y en especial los cristianos, el mensaje alienta a reflexionar
sobre la importancia y apremiante actualidad – al menos en algunas partes del mundo
– de perseverar en la promoción del diálogo. Como muestra precisamente el tema sugerido
por el mismo Pontificio Consejo – “Cristianos y musulmanes: juntos para vencer la
violencia entre fieles de religiones diferentes”.
Tema en el que se ha profundizado
asimismo en la reunión anual que se celebró en El Cairo, el pasado mes de febrero,
del comité mixto para el Diálogo, instituido por este dicasterio pontificio y por
el Comité permanente de Al Azhar, para el Diálogo entre las Religiones Monoteístas.
Reiterando precisamente las conclusiones de este encuentro, el mensaje recuerda
que “entre las causas de la violencia entre fieles de religiones diferentes se pueden
indicar la manipulación de la religión con fines políticos y de otra índole; la discriminación
por motivos étnicos y de identidad religiosa; las divisiones y las tensiones sociales.
Sin olvidar que la ignorancia, la pobreza, el subdesarrollo y la injusticia son también
fuentes directa o indirectamente de violencia entre las religiones así como en el
interior de las mismas”.
En este contexto, el mensaje del Pontificio Consejo
para el Diálogo Interreligioso expresa el anhelo de “¡que las autoridades civiles
y religiosas puedan brindar su contribución, para que se impulse el bien común de
toda la sociedad y que las autoridades civiles correspondientes aseguren una justicia
verdadera y se detenga a los autores y promotores de la violencia!”.
Refiriéndose,
una vez más, a las conclusiones de la reunión en la capital egipcia, el Pontificio
Consejo para el Diálogo Interreligioso renueva las importantes recomendaciones que
se adoptaron en el texto final: “abrir nuestros corazones al perdón recíproco y a
la reconciliación, para una convivencia pacífica y fructuosa. Reconocer, como base
de una cultura del diálogo, aquello que tenemos en común y lo que nos diferencia.
Reconocer y respetar la dignidad y los derechos de todo ser humano, sin distinción
alguna. Necesidad de promulgar leyes justas que garanticen la igualdad fundamental
entre todos. Importancia de la formación al respeto, al diálogo y a la hermandad en
los ámbitos educativos, como son el hogar, la escuela, las iglesias y las mezquitas.
De este modo, podremos contrastar la violencia entre fieles de religiones diferentes
y promover la paz y la armonía entre las comunidades religiosas”.
Recordando
también la importancia de la educación de los jóvenes y de que los líderes religiosos
y los textos escolares presenten a las religiones de manera objetiva, el mensaje
concluye renovando el anhelo de perseverar en el diálogo sereno y afianzado en el
respeto e invocando la bendición de Dios.