Domingo, 01 ago (RV).- En el marco de la celebración, que ha recordado Benedicto XVI
este mediodía, del llamado ‘Perdón de Asís’, que san Francisco obtuvo hace casi ocho
siglos, hoy se evoca con especial intensidad la visión que tuvo el santo mientras
se hallaba en oración en la pequeña iglesia de la Porciúncula.
Apareciéndosele
Jesús en su gloria, con la Virgen María a su derecha y muchos ángeles a su alrededor,
le dijo que expresara un deseo y Francisco imploró un ‘perdón amplio y generoso’ para
todos aquellos que, ‘arrepentidos y confesados’, visitaran aquella iglesia. Recibida
la aprobación pontificia, corrió a Asís y, al llegar a la Porciúncula, anunció la
gran noticia. A partir de entonces, desde el mediodía del 1 de agosto hasta la medianoche
del 2, se puede lucrar, con las condiciones habituales, la indulgencia plenaria también
por los difuntos, visitando una iglesia parroquial o franciscana.
Esta
mañana, en Asís, el Ministro General de la Orden de los Hermanos Menores, Fray José
Rodríguez Carballo, ha presidido la apertura de la solemnidad del Perdón, tan ligada
a la fiesta - también hoy - de Santa María de los Ángeles. El Sucesor de san Francisco
destaca, ante nuestros micrófonos, la devoción a la Madre de Dios que marca este mes
de agosto, que acaba de empezar
El Ministro
General de la Orden de los Hermanos Menores nos recuerda que esta indulgencia se gana
cumpliendo las condiciones establecidas
¡No manipulemos
a san Francisco! En particular, Fray José Rodríguez Carballo hace hincapié en el profundo
conocimiento de Benedicto XVI sobre aquel que el mismo Papa ha llamado ‘genio extraordinario
de la santidad’. Evocando las innumerables catequesis que Benedicto XVI ha dedicado
a este ‘santo universal’, el Ministro General de los Hermanos Menores recuerda el
seguimiento incondicional y radical de Jesús