La Santa Sede insta a la ONU a defender los valores y cultura indígenas
Miércoles, 21 abr (RV).- “La comunidad internacional debe defender los valores y la
cultura de los pueblos indígenas”. Así lo afirmó, el observador Permanente de la Santa
Sede ante Naciones Unidas, Celestino Migliore en su intervención, ayer, en el noveno
Foro de la ONU sobre cuestiones indígenas.
Más allá del duro golpe que la
devastadora crisis financiera ha causado sobre los pueblos indígenas que deben ser
apoyados con programas y proyectos globales para el mejoramiento de sus condiciones
de vida, el prelado vaticano se detuvo particularmente en la necesidad de continuar
los esfuerzos para preservar la cultura y el patrimonio de los mismos.
Monseñor
Migliore explicó que si bien desde la Declaración de los Derechos de los Pueblos Indígenas
se han dado progresos, aún está pendiente un verdadero cambio de las políticas de
desarrollo en favor del respeto de las culturas locales, en particular las indígenas.
La Santa Sede – afirmó- subraya la dimensión de la identidad cultural y considera
fundamental tener una visión integral del desarrollo que comporta, además de la lucha
contra la pobreza, el bienestar de todo hombre y toda comunidad.
En este sentido,
monseñor Migliore hizo notar que la visión tradicional indígena de desarrollo se concentra
en el desarrollo humano en su plenitud y considera como sacros la tierra y el ambiente,
de modo que los recursos de los cuales dispone el hombre no pueden ser reducidos a
una mera actividad económica. Entonces, por encima de la dimensión económica, el desarrollo
“debe prever también elementos sociales, culturales y espirituales que deben ser respetados”,
tales como el “deseo de vivir en una fuerte simbiosis con la naturaleza” y “una profunda
conciencia religiosa”.
“Sostener la cultura indígena no significa regresar
al pasado sino ir hacia adelante manteniendo valores y principios”, subrayó el prelado
vaticano quien reiteró que frente a la modernización, industrialización y urbanización
estos valores no deben ser abandonados.
Por último, en observador permanente
de la Santa Sede ante la ONU exhortó a promover la comprensión y el respeto de la
cultura indígena. “Los pueblos indígenas- concluyó Monseñor Migliore- deben poder
elegir su lengua, practicar su religión y plasmar su propia cultura.