Balance positivo del P. Lombardi sobre el viaje del Papa a Malta
Martes, 20 abr (RV).- El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el Padre
Federico Lombardi, nos brinda un balance del viaje del Papa a Malta: “Ciertamente es
un balance extremamente positivo, diría incluso superior a las expectativas de los
mismos organizadores malteses. Y ello porque el calor de la respuesta, la cantidad
espontánea de personas por las calles – todas alegres y muy ordenadas, correctas en
la manifestación de su entusiasmo – es algo que ha impactado muy profundamente. Creo
que se puede decir tranquilamente que unas 200.000 personas, en los dos días, han
podido ver al Papa. Es decir, una participación coral. El clima era extremamente positivo
y sereno. Diría que son las raíces cristianas de este pueblo, así como su gran tradición
católica las que se han manifestado espontáneamente. Aunque, antes de la visita, había
habido algunas discusiones, no parecía tan claro, tampoco en la prensa, cuál iba a
ser la acogida. Luego, en efecto, la acogida se manifestó de forma coral, total, absolutamente
positiva y disponible a recibir el mensaje del Papa”.
Le pedimos al Padre
Lombardi que nos diga cuál ha sido el mensaje de Benedicto XVI:“El Papa
ha invitado a reconocer la grandeza del don recibido a través de san Pablo y a perseverar
en hacerlo fructificar y mantenerlo vivo. Es decir, la fidelidad gozosa a los valores
cristianos por el bien de la sociedad maltesa, así como el aporte que Malta puede
dar a la comunidad europea y a la sociedad del mundo de hoy, testimoniando los valores
de la familia, de la vida, del compromiso social según los principios de solidaridad
y de caridad que la Iglesia propone. Malta – situada en el centro del Mediterráneo,
encrucijada de encuentro entre culturas y entre pueblos – tiene una misión precisamente
de encuentro, de diálogo, de fecundación de elementos que vienen de diversas culturas
y tradiciones y también una gran tradición de acogida. De ahí el tema de la emigración
y de la acogida de los inmigrados que cruzan el Mediterráneo y del diálogo con los
pueblos que están en las costas de este gran mar, vivido con una perspectiva positiva
de futuro y con una fidelidad al pasado”.
Otro tema que le pedimos al
Padre Federico Lombardi es el del encuentro de Benedicto XVI con algunas víctimas
de abusos: “Fue un encuentro
muy sencillo y diría que, ya de por sí es un mensaje, el mismo modo en que se vivió:
un encuentro discreto, lejos – digamos – del clamor de los medios y de la propaganda.
Enfocado desde un primer momento de oración y luego con una escucha profunda, por
parte del Papa, de las palabras que estas personas anhelan decirle, todo lo que pueden
llevar en el corazón y que quieren decirle al Papa, como pastor y padre. Las respuestas
– digamos – son muy sencillas, muy espontáneas de participación, de dolor, de oración,
de aliento, de esperanza, que el Papa puede decir a cada uno de ellos. Lo importante
es que fuera un encuentro en el que cada uno de los presentes tuviera la posibilidad
de expresarse y la palabra del Papa para él. Porque se trataba de encontrar y – digamos
– de curar las heridas personales profundas y, desde luego, el camino no es tanto
el de los mensajes aclamados, sino más bien el de la escucha y el diálogo profundo.
El Papa pudo hacerlo y concluyó este encuentro, nuevamente, con una oración común
y con una bendición. Me parece que los testimonios brindados por los mismos participantes,
que han querido hablar libremente de ello, han sido extremamente positivos. Yo, que
estuve presente, vi un clima muy, muy conmovido, muy profundo, pero también muy sereno
y lleno de esperanza, de sanación y de reconciliación”.