Ángelus: ante las tensiones en Jerusalén, el Papa recuerda que la paz es un don que
Dios confía a la responsabilidad humana, para que la cultive con el diálogo y el respeto
de los derechos de todos
Domingo, 28 mar (RV).- Benedicto XVI ha vuelto a recordar durante el rezo mariano
del Ángelus, la tierra donde el misterio pascual se cumplió: Jerusalén. El Papa ha
expresado su dolor por los recientes contrastes y por las tensiones que una vez más
se están viviendo en esta ciudad, que como ha recordado el Pontífice, es “patria espiritual
de cristianos, judíos y musulmanes, profecía y promesa de esa reconciliación universal
que Dios desea para toda la familia humana”.
“La paz
es un don que Dios confía a la responsabilidad humana, para que la cultive a través
del diálogo y el respeto de los derechos de todos, la reconciliación y el perdón.
Oremos para que los responsables del futuro de Jerusalén recorran con valentía el
camino de la paz y lo sigan con perseverancia”. Seguidamente el Papa ha dirigido
su pensamiento al Domingo de Ramos de hace 25 años, cuando Naciones Unidas declaró
el “Año de la Juventud”. Precisamente en ese 1985 el Venerable Juan Pablo II dio inicio
a las Jornadas Mundiales de la Juventud. Desde ese día, cada dos o tres años, el Domingo
de Ramos coincide con estos encuentros mundiales, llevando a los jóvenes hacia una
especie de peregrinaje siguiendo los pasos de Jesús.
“Hace 25 años, mi querido
predecesor invitó a los jóvenes a profesar su fe en Cristo que ‘ha cargado en sus
hombros la causa del hombre’ (Homilía, 31 de marzo de 1985). Hoy yo renuevo este llamamiento
a las nuevas generaciones, para que den testimonio con la fuerza dócil y luminosa
de la verdad, para que a los hombres y a las mujeres del tercer milenio no les falte
el modelo más auténtico: Jesucristo”. Este mandato, el Papa lo ha entregado de forma
ideal a los 300 delegados del Foro Internacional de los Jóvenes, llegados desde todos
los rincones del mundo, convocados por el Pontificio Consejo para los Laicos. Como
es tradicional Benedicto XVI ha saludado después a todos los presentes en una plaza
de San Pedro llena de gente, y sobre todo de jóvenes. En francés, inglés, alemán,
esloveno, polaco, español e italiano, el Pontífice ha saludado en especial a los jóvenes
pidiéndoles que ayuden sobre todo a sus coetáneos en dificultad. En este sentido el
Santo Padre ha solicitado una oración especial por la Jornada Mundial de las personas
con autismo, promovida por la ONU el próximo 2 de abril.
Y en español, éstas
han sido las palabras del Papa: “Saludo con afecto
a los peregrinos de lengua española presentes en esta oración mariana. Con la celebración
del Domingo de Ramos, la Iglesia conmemora la Entrada Triunfal del Señor en Jerusalén,
iniciándose así esta Semana grande y santa, donde celebraremos los misterios de la
Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor. Os invito, queridos hermanos, a participar
con especial fervor en las celebraciones litúrgicas de los próximos días, para experimentar
y gozar de la infinita misericordia de Dios, que por amor nos libra del pecado y de
la muerte. Buenas y santas fiestas. Muchas gracias”.