Santa Sede /ONU: prioridad al ser humano, clave para eliminar la codicia

Viernes, 5 feb (RV).- “Dando prioridad a los seres humanos y la creación, podemos modificar las reglas que gobiernan el sistema financiero, lograr cambios concretos que eliminen la codicia, causa de la crisis actual, y promover un desarrollo integral efectivo e implementar los derechos humanos, porque ‘el primer capital que se ha de salvaguardar y valorar es el ser humano en su integridad’”. Esta ha sido la recomendación del arzobispo Silvano Tomasi, observador permanente de la Santa Sede ante Naciones Unidas, en su intervención esta semana ante la sesión del Consejo para los Derechos Humanos de la ONU.

No obstante algunos signos de recuperación, que reconoció Mons. Tomasi, la crisis continúa agravando la condición de millones de personas y su acceso a las necesidades básicas, y ha colocado a las pensiones en una situación muy comprometida. El arzobispo subrayó la necesidad de nuevas legislaciones y un sistema de gobierno global que asegure un desarrollo sostenible e integral para todos.

El arzobispo ha denunciado las negativas consecuencias de la crisis financiera como el escándalo del hambre, la creciente desigualdad mundial, los millones de desempleados y otros tantos reducidos a la extrema pobreza, el fracaso institucional y la ausencia de protección social para innumerables personas vulnerables. Citando la Caritas in veritate de Benedicto XVI, Mons. Tomasi ha pedido una redistribución justa porque la “equidad y la justicia son criterios esenciales en la administración de la economía mundial”.

El observador permanente ante la ONU ha retomado la encíclica del Santo padre para reafirmar en este momento de crisis económica la invitación a superar la obsoleta dicotomía entre economía, sociedad y ecología. “Los mercados y la libertad -ha subrayado el arzobispo-, son requisitos importantes en la construcción de una sociedad próspera, pero deben incluir los principios universales de honestidad, justicia, solidaridad y además los principios de reciprocidad y donación”.