Ángelus: el Papa condena el asesinato de cristianos en Mosul y pide al gobierno de
Irak que restablezca la seguridad, en particular, para las minorías religiosas más
vulnerables
Domingo, 28 feb (RV).- Benedicto XVI ha recibido con “profunda tristeza las trágicas
noticias de los recientes asesinatos de algunos cristianos en la ciudad de Mosul”
y sigue con gran preocupación el resto de los episodios de violencia perpetrados en
la martirizada tierra iraquí contra personas inermes de distinta pertenencia religiosa.
En la delicada fase política que está atravesando Irak el Pontífice ha dirigido
durante el Ángelus un “llamamiento a las autoridades civiles para que hagan cualquier
esfuerzo para devolver a la población seguridad y, en particular, a las minorías religiosas
más vulnerables”. El Papa ha subrayado su esperanza en que “no se ceda a la tentación
de hacer prevalecer los intereses temporales y partidarios con respecto a la incolumidad
y los derechos fundamentales de cada ciudadano”.
El Papa ha saludado a los
iraquíes presentes en la plaza de san Pedro y les ha expresado a ellos y a las comunidades
cristianas de todo el país su afecto y cercanía. ¡No os canséis –les ha dicho- de
ser fermento del bien para la patria a la que pertenecéis de pleno derecho desde hace
siglos! .El Santo Padre se ha dirigido también a la comunidad internacional para que
redoble sus esfuerzos para dar a los iraquíes un futuro de reconciliación y de justicia,
y ha invocado de Dios omnipotente el precioso don de la paz.
“En estos días
de intenso recogimiento, - ha recordado el Papa refiriéndose a la semana de ejercicios
espirituales que acaba de concluir- he rezado a menudo por todas las víctimas de esos
atentados y hoy deseo unirme espiritualmente a la oración por la paz y por el restablecimiento
de la seguridad, promovida por el Consejo de Obispos de Nínive”.