Mensaje del Papa al concluir la ostensión de los restos de san Antonio de Padua
Domingo 21 feb (RV).- Benedicto XVI alentó a ser discípulos y misioneros de Cristo,
iluminados por san Antonio de Padua, impulsando la justicia, la paz y la caridad.
Se trata del mensaje enviado en nombre del Papa, por el cardenal Secretario de Estado,
al concluir la ostensión de los restos mortales del santo franciscano, en la Pontificia
Basílica de la mencionada ciudad italiana.
En la Santa Misa celebrada en la
tarde de ayer, se leyó el mensaje de Benedicto XVI al Rector de la Basílica de San
Antonio, culminando así esta excepcional manifestación devocional. El Santo Padre
aseguró su cercanía espiritual, y saludó afectuosamente a los beneméritos Frailes
Menores Conventuales y a los fieles y devotos, que han acudido tan numerosos, para
venerar al “gran apóstol de la predicación y de la caridad”.
Reiterando “el
luminoso ejemplo de este sacerdote franciscano, tan popular, que fascinó a generaciones
de fieles, inspirando a numerosos jóvenes a abrazar la vida consagrada, en fidelidad
a la regla seráfica”, Benedicto XVI anheló asimismo que “éste próvido evento suscite
renovados propósitos de amor a Cristo y a los hermanos, así como un generoso compromiso
en favor de la justicia y de la paz”. Con tales votos, el Santo Padre invocó, por
intercesión del gran taumaturgo, copiosos favores celestiales sobre los participantes
en las solemnes manifestaciones, enviando de corazón su especial Bendición Apostólica.