Latinoamérica/encuentro: procesos de comunicación y cultura solidaria
Lunes, 8 feb (RV).- ‘Mutirão’ Muchos
construyen su casita poco a poco y en familia. Pero como el cemento se seca rápido,
cuando hay que hacer el techo llaman a todos los vecinos y amigos para que ayuden,
y todos juntos terminan la casa.
‘Mutirao’ significa trabajo juntos. Este ‘trabajo
juntos’ es una buena imagen, un lindo ejemplo de la ‘comunicación que lleva a la comunión’.
Alrededor
de 2000 comunicadores, investigadores, docentes, periodistas y estudiantes, de América
Latina y el Caribe, se reunieron en Porto Alegre (Brasil), del 3 al 7 de febrero de
2010, en el Mutirão de la Comunicación, invitados para analizar los ¨Procesos de comunicación
y cultura solidaria¨.
El CELAM, la conferencia episcopal de Brasil y OCLACC:
Organización Católica Latinoamericana y Caribeña de Comunicación organizaron el evento.
‘Dios
esta cerca, y es el garante del desarrollo humano…’ ‘El rostro humano de Cristo…’
Se escucho desde el inicio en la voz de Mons. Celi… Guillermo Ortiz Mondragón de la
RIIAL, la Red Informática de la Iglesia en América Latina y Ana Maria Rodríguez, presidenta
de OCLACC, entre otros.
El encuentro terminó con la aprobación de la ‘Carta
de Porto Alegre’
En la Carta de Porto Alegre se destaca que el Mutirão de la
Comunicación "propició el intercambio de experiencias y de saberes entre comunicadores
y comunicadoras con diferentes trayectorias personales, profesionales, políticas,
religiosas y culturales unidos no obstante en el compromiso y en la responsabilidad
común con los pueblos de la región que luchan por la dignidad, la justicia, y en defensa
de una democracia que sea capaz de garantizar la vigencia de sus derechos económicos,
sociales y culturales".
"Impulsadas e impulsados por el Evangelio de Jesús,
soñamos con: Una ciudadanía comunicacional... una palabra liberada... Políticas públicas
de comunicación... Una sociedad movilizada... Ciudadanos, comunicadores y actores
sociales preparados... Movimientos sociales, organizaciones populares, Iglesias ...”
Para
Radio Vaticana, Guillermo Ortiz, jesuita, desde Porto Alegre.
Carta
de Porto Alegre/ Texto completo
Somos comunicadores y comunicadoras
solidarios con nuestros pueblos e integrados plenamente en su caminar. Compartimos
los sufrimientos, las crisis, las alegrias y las esperanzas de nuestras hermanas y
hermanos. Por ese motivo, y aún en medio de la crisis civilizatoria que nos atraviesa,
que se expresa, entre otros factores, en la mundialización de las economias y en la
libre circulación de mercaderías y de capitales especulativos, nos atrevemos a reflexionar
y soñar alimentando la utopia y la esperanza.
Somos comunicadores y
comunicadoras, investigadores, docentes, periodistas y estudiantes, de América Latina
y el Caribe, reunidos en Porto Alegre (Brasil), del 3 al 7 de febrero de 2010, en
el Mutirão de Comunicação, donde hemos sido invitados para analizar los ¨Procesos
de comunicación y cultura solidaria¨.
El Mutirão propició el intercambio
de experiencias, de saberes y la comunión en Jesucristo entre comunicadores y comunicadoras
con diferentes trayectorias personales, profesionales, políticas, religiosas, culturales,
unidos no obstante en el compromiso y en la responsabilidad común con los pueblos
de la región que luchan por la dignidad, la justicia, y en defensa de una democracia
que sea capaz de garantizar la vigencia de sus derechos económicos, políticos, sociales
y culturales.
Esta carta traduce nuestros sueños de futuro apoyados
en el compromiso político de concretar una utopia construida sobre el rico bagage
cultural y religioso acumulado a lo largo de los años, que representa una enorme riqueza
de nuestros pueblos y nuestras culturas, especialmente indígenas, negros y migrantes,
contituyendo una herencia tantas veces despreciada. Este rico legado junto a la vitalidad
de los movimientos sociales actuales, habilita el surgimiento de actores que tienen
"derecho a tener derecho" y son los forjadores de nuestra diversidad cultural .
Decimos
con Dom Helder Câmara que ¨cuando soñamos solos es sólo un sueño; cuando soñamos juntos
es el comienzo de una nueva realidad¨ (Mensaje de Navidad, 1992). Por eso hacemos
esta convocatoria a la acción que, sin abandonar una mirada analítica y crítica sobre
la realidad política-social-cultural-religiosa y comunicacional, busca la construcción
de una nueva ciudadanía comunicativa que contribuya a la plena vigencia de los derechos
humanos y de las condiciones de una vida digna.
Compartiendo las incertidumbres
naturales de quienes están involucrados en el proceso histórico social y sin pretender
agotar las propuestas, pero con la firmeza de nuestras convicciones, saberes, experiencias,
sensibilidad y pasión, e impulsados e impulsadas por el Evangelio de Jesús, soñamos
con:
1. Una ciudadanía comunicacional que, en el marco de los procesos
políticos y culturales, permita la participación creativa y protagónica de las personas
como forma de eliminar la concentración de poder de cualquier tipo para, así, construir
y consolidar nuevas democracias. Ciudadanía que no puede pensarse sólo en términos
jurídicos, sino como una actitud y una condición asociada a la reivindicación de ser
reconocido, de tener arte y parte en las decisiones que afectan a la vida en sus múltiples
dimensiones, porque no hay democracia política sin democracia comunicacional.
2.
Una palabra liberada de todo tipo de opresión y discriminación, para que se apropien
de ella también los jóvenes y las jóvenes, los más pobres y pequeños, como gérmen
de una cultura solidaria.
3. Políticas públicas de comunicación, elaboradas
a partir de la idea de que la comunicación es un derecho humano y un servicio público,
y en las cuales haya espacio tanto para la iniciativa privada comercial, como para
los medios estatales, los médios públicos no gubernamentales y los comunitarios.
4.
Una sociedad civil movilizada para incidir políticamente en busca de una comunicación
libre, socialmente responsable, justa y participativa.
5. Ciudadanos,
comunicadores y actores sociales preparados para sostener y vigilar prácticas comunicativas
democráticas, participativas, inclusivas y apoyadas en una perspectiva integral del
derecho a la comunicación.
6. Movimientos sociales, organizaciones
populares, iglesias e instituciones que se apropien e incorporen en sus prácticas
comunicativas los entornos y los procesos de las tecnologías de la información y los
nuevos lenguajes a fin de ampliar su horizonte comunicacional y contribuir a la eliminación
de la brecha informativa y digital.
7. Responsables de la gestión del
Estado capaces de llevar adelante políticas públicas y estrategias de comunicación
destinadas a asegurar el derecho a la comunicación a través de acciones pertinentes
y efectivas que eliminen las diferencias y las desigualdades que hoy existen en materia
de producción, acceso y circulación de todo tipo de bienes culturales.
8.
Cristianos comprometidos y organizados que, a partir de su fe, tengan una presencia
activa y tranformadora en el campo de la comunicación incorporando las nuevas tecnologias
en el espíritu y los lineamientos de esta carta.
Soñamos, en fin, con
comunicadores y comunicadoras:
• cuya práctica profesional esté marcada
por la vivencia de una cultura solidaria, por criterios éticos y por una vida coherente
con esos principios;
• que se saben ante todo servidores del derecho
de los ciudadanos a recibir y emitir información y opinión; no se subordinan a los
intereses y las presiones del poder político o económico porque están comprometidos
con la ciudadanía comunicacional;
• que están junto a los empobrecidos
e incorporan su mirada;
• que impulsan el diálogo para enfrentar las
contradicciones, inevitables en cualquier sociedad, con el fin de arribar a la paz
y a la justicia;
• que no se preocupan sólo de ser plurales sino más
aún, de valorar las diferencias surgidas en el camino de la búsqueda de la verdad;
•
que suscitan solidaridad a partir de los procesos de comunicación;
•
que saben escuchar y estar atentos especialmente al clamor que emerge desde el murmullo
de los silenciados para así contribuir a la visibilidad de los invisibles de hoy.
Domingo,
7 feb (RV).- Se clausura hoy en Porto Alegre, Brasil, el I Congreso de Comunicación
para América latina y El Caribe en torno al tema "Procesos de Comunicación y Cultura
Solidaria". Los nuevos escenarios políticos y sociales latinoamericanos y los procesos
de comunicación en la era digital y en el diálogo de las culturas, han sido los ejes
temáticos de esta cadena de comunicación o Mutirao, de la que nos habla Mons.
Guillermo Ortiz, responsable del Departamento de comunicación del Consejo Episcopal
Latinoamericano (CELAM). La entrevista es del P. David Gutiérrez
Sábado, 6
feb (RV).- El encuentro de Comunicación de America Latina y el Caribe que se está
realizando en Porto Alegre, Brasil ha llegado hoy a su penúltimo día de reflexiones.
Unas 1.600 personas, en su mayoría trabajadores en el campo de la comunicación, han
participado en este evento organizado por la Conferencia Episcopal de Brasil, el CELAM
y la Organización católica latinoamericana y del Caribe para la Comunicación (OCLACC).
La presencia de religiosos y obispos ha sido bastante importante y, entre
ellos, la de Monseñor Juan Luis Ysern, obispo emérito de Ancud, en Chile, quien durante
años ha dedicado sus esfuerzos para elevar las comunicaciones como dimensión pastoral
al servicio de la evangelización.
Monseñor Ysern por varios años fue presidente
de la Comisión de Medios del CELAM, precursor de organizaciones como la misma OCLACC
o la Asociación de Radiodifusoras Católicas y ha recibido premios y menciones de honor
en el campo de la comunicación. De allí que hemos querido conocer en principio sus
impresiones sobre este evento.
El uso de los
medios de comunicación por parte de la Iglesia, pero sobretodo el alcance de las nuevas
tecnologías en el campo pastoral han sido tema de varias conferencias. No obstante,
Monseñor Ysern considera que el mayor desafío es lograr entrar en este nuevo universo
comunicacional sin prejuicios o viejas estructuras y lenguajes.
También le
preguntamos a Monseñor Ysern sobre el estado actual del uso de los medios de comunicación
y nuevas tecnologías en la Iglesia del continente.
Por último,
Monseñor Ysern pone de relieve la importancia del mensaje de Benedicto XVI para la
Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales de este año: “El sacerdote y la pastoral
en el mundo digital: los nuevos medios al servicio de la Palabra".
Viernes,
5 feb (RV).- Concluye este domingo en la localidad brasileña de Porto Alegre, el Mutirão
de comunicación América Latina- El Caribe, promovido por la Conferencia Episcopal
brasileña junto al Consejo Episcopal latinoamericano (CELAM) y la organización católica
latinoamericana para la comunicación (OCLACC); el evento reúne por primera vez a 37
países del área, para reflexionar en común sobre el tema “procesos de comunicación
y cultura solidaria” y se desarrolla en la Universidad católica de Río Grande do Sul.
Con la palabra “Mutirão” se designa una forma solidaria y comunitaria de trabajo
que busca la realización de una obra de interés colectivo, por tanto el encuentro
tiene como objetivo ser un momento de participación en donde los instrumentos, las
posibilidades de comunicación y los valores de una cultura solidaria puedan contribuir
en la construcción de una sociedad comprometida a favor de la justicia, de la libertad
y de la paz. La presidenta de OCLACC, Ana María Rodríguez, explicó a nuestros
micrófonos cómo se organizó este encuentro de comunicación.
Asimismo nos
dio más detalles sobre los participantes.
Precisamente
entre los participantes está el presidente de la asociación de comunicadores católicos
de Ecuador, José Mármol. Quien nos explicó de este modo las problemáticas a las
que se enfrentan los agentes de pastoral ante las nuevas tecnologías.
En concreto,
usted, como presidente de la asociación de comunicadores católicos de Ecuador, cuáles
cree que son los problemas a los que se enfrenta su país en particular y América Latina
en general, en ámbito comunicativo.
Y sobre las
primeras conclusiones que se pueden extraer de este encuentro nos dijo:
Inauguró el
encuentro la conferencia del arzobispo Claudio Maria Celli, presidente del Pontificio
Consejo de las Comunicaciones Sociales, quien nos ha hablado sobre la importancia
de este evento para el continente y para el consejo que preside.
¿Nos puede hablar
sobre su ponencia?
Durante las
primeras reuniones en Brasil ha salido a la luz en diferentes ocasiones la importancia
del contenido de la Encíclica social de Benedicto XVI, Caritas in veritate", para
los comunicadores. Un argumento que el propio Mons. Celli evidenció en su discurso,
y que analiza para nosotros el secretario ejecutivo de la OCLACC, Pedro Sánchez
Coronel.
Asimismo le
preguntamos sobre la importancia de este encuentro de comunicadores católicos.
¿Y cuáles
son los desafíos a los que se enfrentan los comunicadores católicos?