2009-10-07 15:59:29

Intervención de Mons. Thomas KABORÉ, Obispo de Kaya (BURKINA FASO)


S. E. R. Mons. Thomas KABORÉ, Obispo de Kaya (BURKINA FASO)



La educación en favor de la justicia y de la paz es una misión esencial de la Iglesia como Familia de Dios. Los niños de Dios son artesanos de la paz: "bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios", proclama el Señor Jesús. Si la Iglesia existente en África es Familia de Dios, es lugar de reconciliación, de justicia y de paz.

En un continente en el que se desgarra por los conflictos y las luchas, es Dios quien nos invita a ser una Iglesia Familia, lugar de reconciliación, de justicia y de paz. Por esto, los Padres del primer Sínodo para África “reconocieron rápidamente que la Iglesia como Familia sólo puede dar su medida de Iglesia ramificándose en comunidades suficientemente pequeñas que permitan estrechas relaciones humanas (...) sobre todo para vivir del amor universal de Cristo que transciende las barreras de las solidaridades naturales de los clanes, tribus u otros grupos de interés” [Ecclesia in África § 89].

Para asumir dicha misión, nos hace falta pues trabajar para transformar nuestras Comunidades Cristianas de Base (CCB). Éstas deberían volverse verdaderas familias: eso significa conversión, “solicitud por el otro, la solidaridad, el calor de las relaciones, la acogida, el diálogo y la confianza”[Ecclesia in África § 63]. Llamamos así a estas Pequeñas Comunidades, Comunidades -Familia. Ellas son las que darán a la Iglesia su rostro y su realidad de familia para hacer de ellas lugares de reconciliación.

Lo esencial del trabajo para llegar a dicha edificación de la familia será, antes que nada, la Evangelización. El primer objetivo de estas Comunidades-familia es el constituirse en Escuelas de Evangelización. Es importante que todas las Iglesias lleguen a ser una comunión de Comunidades-Familia y que toda la Iglesia sea evangelizada, es decir, que sea renovada interiormente y llegue a ser una humanidad nueva. Esto supone que los pastores se vuelvan predicadores itinerantes de la Buena noticia y que vayan de comunidad en comunidad.

La Evangelización será así menos una cuestión de método y de técnicas, que testimonial: “Un verdadero testimonio por parte de los creyentes hoy es esencial en África para proclamar de manera auténtica la fe. En particular, es necesario que se de testimonio de un sincero amor recíproco” [Ecclesia in África § 77]

Construir la Iglesia como Familia de Dios significa, por tanto, promover que las Comunidades -Familia sean verdaderas familias de Dios, lugares de integración entre cristianos de diferentes etnias, regiones y condiciones sociales







All the contents on this site are copyrighted ©.