Inglaterra y Gales: obispos a favor de modificar el código deontológico sobre enfermos
terminales
Jueves, 2 jul (RV).- Los obispos de Inglaterra y Gales han acogido positivamente la
decisión del Colegio de Médicos británicos de revisar el protocolo de los tratamientos
paliativos para los enfermos terminales. El esquema del documento, sometido en las
últimas semanas a una amplia consulta pública, modifica en parte el precedente código
deontológico en esta materia, que estaba basado en la jurisprudencia y que se ha ido
consolidando paulatinamente desde el caso Bland en 1993, una situación análoga a la
de Eluana Englaro en Italia.
En aquel caso los jueces decidieron que los médicos
no estaban obligados a suministrar tratamientos inútiles tras haber evaluado de forma
científica las condiciones de vida del paciente y que, por lo tanto, no respondían
a su mejor interés. La sentencia sentó jurisprudencia en el Reino Unido y de ella
emanó la ley sobre el testamento biológico promulgada en 2005, que sin embargo no
concretó distintos aspectos éticos.
Ahora con el nuevo texto, los obispos ingleses
y galeses reconocen mejoras significativas. Entre ellas: la insistencia sobre la necesidad
de promover cuidados paliativos y espirituales; centrar la atención sobre el suicidio
asistido y el homicidio compasivo; el reconocimiento de que la alimentación e hidratación
es considerada por muchas personas como una forma de soporte vital, incluso cuando
es suministrada por medio de una sonda.
Los obispos además comparten la afirmación
de que los médicos deben ofrecer siempre alimentación e hidratación asistida si ello
puede ayudar a prolongar la vida del paciente y el principio por el que las decisiones
sobre el final de la vida nunca deben estar motivadas por el deseo de causar la muerte
del paciente.