Benedicto XVI pide la liberación de 3 cooperantes de la Cruz Roja secuestrados en
Filipinas y hace un llamamiento para que sentido humanitario y razón prevalezcan sobre
violencia e intimidación
Martes, 31 mar (RV).- Benedicto XVI, «haciendo propia la preocupación de los familiares
y de cuantos anhelan la salvación de los cooperantes de la Cruz Roja - secuestrados
en la isla filipina de Joló - desea elevar su voz y dirigir un llamamiento para que
el sentido humanitario y la razón prevalezcan sobre la violencia y la intimidación».
«El
Santo Padre, en nombre de Dios, pide la liberación de los tres rehenes y solicita
a las autoridades que favorezcan toda pacífica solución de este dramático suceso».
El comunicado de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, que da esta noticia, se hizo
público en la tarde de ayer.
Los tres cooperantes de la Cruz Roja Internacional
fueron secuestrados en Filipinas, por Abu Sayyaf, que amenaza con decapitar a un
rehén si el Ejército filipino no se retira simultáneamente de 15 aldeas del sur del
país, con un ultimátum de 24 horas, que vencía esta mañana y que luego fue ampliado
a tres horas más.
Los rehenes son Jean Lacaba, filipina, de 37 años; Andreas
Notter, suizo, de 39 años y Eugenio Vagni, italiano, de 62. Y fueron secuestrados
por esta organización extremista el pasado 15 de enero cuando llevaban a cabo una
inspección rutinaria de una cárcel en Joló. Fundado en 1991 por ex combatientes de
la guerra de Afganistán contra la Unión Soviética, Abu Sayyaf está vinculado a la
Yemaa Islamiya, considerado el brazo de Al Qaeda en el Sudeste Asiático. Y se le atribuyen
los atentados más sangrientos de los últimos años en el archipiélago y múltiples secuestros
de nacionales y extranjeros.
No obstante, el gobierno de Filipinas insiste
en que no puede replegarse a tiempo de 15 aldeas de Joló como pidieron los rebeldes
y declaró hoy el estado de excepción en el sur del archipiélago para que el Ejército
pueda atacar el campamento de Abu Sayyaf donde están secuestrados tres cooperantes
de la Cruz Roja Internacional. El gobierno recuerda que hace dos semanas, Abu Sayyaf
aseguró que liberaría a uno de los rehenes si los soldados suspendían la ofensiva
contra ellos en Joló, pero la guerrilla finalmente no cumplió su promesa a pesar de
que los militares cumplieron su demanda.
El tiempo impuesto por los secuestradores
ha caducado y se teme un cruento epílogo teniendo en cuenta que Abu Sayyaf es considerado
uno de los grupos terroristas más sangrientos de los últimos años en el archipiélago
y múltiples secuestros de locales y extranjeros.