2009-03-19 13:42:58

Benedicto XVI espera que el Sínodo para África contribuya a hacer crecer la esperanza en sus pueblos y dé un nuevo impulso misionero al servicio de la reconciliación, la justicia y la paz


Jueves, 19 mar (RV).- Fruto de una profunda reflexión el instrumento de trabajo que el Santo Padre entregó hoy a los obispos de África presenta los aspectos más relevantes de la situación eclesial y social del continente, pero sobretodo refleja el dinamismo de la iglesia africana y sus principales desafíos.

Al concluir la multitudinaria celebración eucarística en el estadio Ahidjo, Benedicto XVI entregó oficialmente el instrumento de trabajo de la II Asamblea especial del Sínodo para África iniciando su breve alocución con el recuerdo de su predecesor Juan Pablo II quien hace 14 años, justamente en Yaundé, consignó la Exhortación apostólica post-sinodal ‘Ecclesia in Africa’.

“Hoy para mi es motivo de gran alegría el entregarles el texto del instrumentum laboris” -manifestó el Pontífice- y puso de relieve que el tema de la Asamblea Sinodal: “La iglesia en África al servicio de la reconciliación, de la paz y de la justicia” es de gran importancia para la vida del continente, pero también para la vida de la iglesia universal.

Benedicto XVI destacó que partiendo de las importantes reflexiones contenidas en el instrumento de trabajo los obispos deberán examinar la situación social de los distintos países del continente, el dinamismo de la iglesia y los retos a los que se enfrenta.

“Espero vivamente que los trabajos de la Asamblea sinodal contribuyan a hacer crecer la esperanza para vuestros pueblos y para el continente en general: contribuyan a infundir en cada una de vuestras Iglesias locales un nuevo impulso evangélico y misionero al servicio de la reconciliación, de la justicia y de la paz, según el programa formulado por el mismo Señor: “Ustedes son la sal de la tierra… Ustedes son la luz del mundo” (Mt 5, 13.14). Que la alegría de la Iglesia en África por este Sínodo sea alegría de la Iglesia Universal”

Y al exhortar a los fieles a unirse a sus obispos y a acoger en la oración la preparación y desarrollo del sínodo, Benedicto XVI concluyó su discurso invocando a la Reina de la Paz para que sostenga los esfuerzos de todos los “artesanos” de reconciliación de justicia y de paz.

DISCURSO COMPLETO

Queridos Hermanos en el Episcopado,
Presidentes de las Conferencias Episcopales nacionales y regionales de África y Madagascar

 
Hace catorce años, el 14 de septiembre de 1995, mi venerado Predecesor, el Papa Juan Pablo II, firmaba precisamente aquí, en Yaundé la Exhortación apostólica postsinodal Ecclesia in Africa. Hoy es para un mí motivo de gran alegría entregaros el texto del Instrumentum laboris de la Segunda Asamblea Especial para África del Sínodo de los Obispos, que se celebrará en Roma el próximo mes de octubre. El tema de esta Asamblea «La Iglesia en África al servicio de la reconciliación, la justicia y la paz», que está en continuidad con la Ecclesia in Africa, tiene gran importancia para la vida de vuestro Continente, pero también para la vida de la Iglesia universal. El Instrumentum laboris es fruto de vuestra reflexión, a partir de los aspectos relevantes de la situación eclesial y social de vuestro País de origen. Refleja el gran dinamismo de la Iglesia en África, pero también los desafíos con los que tiene que enfrentarse, y que el Sínodo tendrá que examinar. Esta tarde tendré ocasión de tratar más detenidamente este tema con los miembros del Consejo especial para África del Sínodo de los Obispos. Deseo ardientemente que los trabajos de la Asamblea sinodal contribuyan a hacer crecer la esperanza para vuestros pueblos y para el Continente en su conjunto; que sirvan para infundir en cada una de vuestras Iglesias particulares un nuevo impulso evangélico y misionero al servicio de la reconciliación, la justicia y la paz, según el programa expresado por el Señor mismo: «Vosotros sois la sal de la tierra [...]. Vosotros sois la luz del mundo» (Mt 5,13.14). Que la alegría de la Iglesia en África por la celebración de este Sínodo sea también la alegría de la Iglesia universal.

 
Queridos hermanos y hermanas que os unís estrechamente en torno a vuestros Obispos, representando en cierto modo la Iglesia que peregrina en todos los pueblos de África, os invito a acoger en vuestra plegaria la preparación y el desarrollo de este gran acontecimiento eclesial. Que la Reina de la Paz aliente los esfuerzos de todos los «artesanos» de reconciliación, justicia y paz. Nuestra Señora de África, ruega por nosotros.







All the contents on this site are copyrighted ©.