En nombre del Papa el Card. Bertone felicita la Navidad a los niños de un hospital pediátrico

Martes, 16 dic (RV).- En la atmósfera espiritual del tiempo de Navidad, el cardenal Secretario de Estado, Tarcisio Bertone ha realizado esta mañana una visita de cortesía al hospital pediátrico Babino Gesù de Roma. Un encuentro que, como ha dicho el mismo cardenal Bertone, “asume el significado de una breve pero intensa reunión familiar”. No es la primera vez que va de visita el cardenal, “pero es en estas ocasiones que encontrar a los médicos asume, en un lugar donde hay tantos niños enfermos, un valor todavía más tocante”.

“Mi presencia entre vosotros, -ha dicho el purpurado dirigiéndose al personal sanitario del hospital romano-, es sobre todo una renovada ocasión para agradeceros el servicio precioso que diariamente prestáis a estos niños enfermos y a sus familias; y también mi visita es una ocasión para expresar mi deseo de una cordial y sincera felicitación para esta Navidad y el próximo Año Nuevo que ya se acerca por el horizonte”.

“Y mi alegría es todavía mayor -ha añadido el cardenal Secretario de Estado- porque vengo a transmitiros las felicitaciones del Santo Padre Benedicto XVI que sigue con afecto vuestro trabajo y las importantes actividades que realizáis en el Hospital, con generosidad y con coraje”. El Papa a través de mi persona os transmite su oración y un especial recuerdo para la Noche Santa, cuando trepidantes, contemplaremos el evento sorprendente del nacimiento de Jesús en Belén”.

El cardenal Bertone ha explicado también que leyendo un libro estos días ha encontrado un breve pensamiento del Siervo de Dios Pablo VI, del que recordamos este año el 30 aniversario de su muerte. “Por Navidad todos nos convertimos en niños -escribió el Papa Montini- y gustamos un momento delicioso. La maravilla es una característica de la fiesta de Navidad. Porque estamos como sorprendidos y encantados en el ánimo”. En estas palabras del Papa Pablo VI, ha finalizado el purpurado, “encontramos sintéticamente encerrado el sabor humano de esta fiesta y su riqueza espiritual”.