Domingo, 16 nov (RV).- Como cada semana el director de la Oficina de prensa de la
Santa Sede y director también de Radio Vaticano, el padre Federico Lombardi, escribe
y lee su editorial, centrada en los temas más sobresalientes de la actualidad. Hoy
nos habla de las sangrientas guerras en África, cuyas víctimas son casi siempre los
civiles inermes, las personas inocentes y los más débiles. El título es: “la matanza
de los pobres”:
«Hace pocos días, en ocasión del anuncio del próximo viaje
del Papa a África, hablamos de la dignidad de los africanos y de la esperanza. Pero
las noticias, que continúan llegando de la región del norte de Kivu, nos llenan diariamente
de angustia. El pasado domingo 9 de noviembre, el Papa en el Ángelus levantó su voz
denunciando “destrucción, saqueos y violencia de todo tipo” contra civiles inocentes.
Esta región en el corazón del continente viene siendo
torturada desde hace demasiado tiempo. Los muertos en estos años, en el curso de varios
conflictos, se cuentan por millones. Probablemente sea la matanza más impresionante
del Planeta en los últimos 15 años. Y como siempre pasa en los conflictos contemporáneos,
la mayor parte de las víctimas son civiles inocentes, arrollados en la sangre por
una trama enmarañada de intereses inconfesables, de antiguos odios y de pasiones perversas.
El Mal, el gran enemigo que se ensaña en las criaturas de Dios, confunde la razón
en una oscuridad intrincada, lleva hasta el extremo, el desprecio por la vida, y parece
dominar ineluctablemente.
Demasiado lentas y tímidas
son las reaccione frente a esta masacre de los pobres. Frente a todo esto, los creyentes
se deben armar de amor a toda costa. Un amor capaz de resistir la violencia siguiendo
el ejemplo del Señor. Pero para reconstruir la paz es necesario volver al respeto
de la dignidad de toda persona humana, es necesario empeñarse verdaderamente a fondo,
en la educación y en el desarrollo, y constituir un contexto internacional que no
permita alimentar los conflictos en vez de construir la paz. Si no es así África continuará
muriendo».