El Papa bendijo ayer una estatua de la Madre Teresa donada por un artista macedonio
Jueves, 04 sep (RV).- Benedicto XVI bendijo ayer una estatua de la Madre Teresa,
que le ha sido donada y que permanecerá en la casa Don de María en el Vaticano en
espera de ser colocada - por deseo del mismo Papa - en una parroquia romana que se
está construyendo y que se dedicará a esta beata.
Después de su audiencia
general, el Santo Padre bendijo esta imagen, de tres metros de alto, que representa
a la gran misionera de la Caridad, que - como señaló el Siervo de Dios Juan Pablo
II el día de su beatificación - «llevó las almas a Dios y Dios a las almas y sació
la sed de Cristo, especialmente de aquellos más necesitados, aquellos cuya visión
de Dios se había ofuscado a causa del sufrimiento y del dolor».
También después
de su audiencia, el Papa saludó a un grupo de 90 jóvenes provenientes de 30 países,
que están participando en la diócesis italiana de Loreto, en la sétima edición del
Ágora de la juventud del Mediterráneo. Encuentro que abarca las realidades que tienen
que afrontar, precisamente, los jóvenes en las dificultades que se viven en Tierra
Santa y en los Balcanes. Este grupo recibió con gran emoción las palabras de aliento
de Benedicto XVI, animándolos a impulsar la paz, el perdón y la reconciliación.