Con el llamamiento del Papa como telón de fondo, el Cardenal Arzobispo de Bombay y
los Obispos de la India exhortan a realizar marchas por la paz ante los ataques de
los fundamentalistas que no quieren que la Iglesia trabaje en favor de los derechos
humanos y de los pobres
Jueves, 28 ago (RV).- El Arzobispo de Bombay y presidente de los obispos latinos de
la India, Card. Oswald Gracias, se une al apremiante llamamiento de Benedicto XVI
para que cesen las violencias. También todos los prelados indios exhortan a realizar
marchas en favor de la paz en todo el país, como respuesta a los gravísimos sucesos
violentos, manifestando el anhelo de una convivencia pacífica y contra los reiterados
ataques de los fundamentalistas.
Mañana, viernes 29 de agosto, las escuelas
católicas del país permanecerán cerradas y, para el domingo 7 de septiembre, se ha
convocado una Jornada de oración y ayuno. Ante nuestros micrófonos, el Cardenal de
Bombay nos cuenta la incertidumbre que embarga a los cristianos.
«Los cristianos
en Orissa –afirma el Purpurado- viven con miedo, porque no saben qué pasará. Por los
menos 25 iglesias cristianas han sido destruidas. Hay violencia. Hay una hostilidad
que está aumentando. Hemos dirigido un llamamiento al gobierno para que intervenga
de inmediato».
El Santo Padre invitó ayer a los líderes religiosos y a las
autoridades civiles a aunar esfuerzos para promover una convivencia pacífica. El purpurado
indio refiriéndose al diálogo entre las diversas realidades de la sociedad en su país
nos dijo: «Hay tantas iniciativas que la Iglesia católica ha impulsado para el diálogo.
Tantas iniciativas que están cosechando buenos resultados. Lamentablemente, en Orissa,
no las ha habido».
A la pregunta de si la persecución de las comunidades cristianas,
por parte del fundamentalismo, intenta detener la promoción cristiana de los principios
arraigados en la persona y en la libertad, el Card. Oswald Gracias respondió: «Sin
duda. Porque estas fuerzas fundamentalistas no quieren que la Iglesia trabaje en favor
de los derechos humanos, en favor de los pobres. No quieren que la Iglesia contribuya
a mejorar el nivel de vida de esta gente. Por eso hay problemas».
Teniendo
en cuenta que los cristianos defienden la voz del Evangelio y de los más indefensos
con la fuerza de la fe, a la pregunta de qué respuesta debe dar la Iglesia en la India,
con la ayuda de la sociedad, para apagar el fuego de la intolerancia, el purpurado
afirmó textualmente: «Ahora sirven la oración y la fe en la Cruz de Jesús. Ahora,
después de la violencia, debemos examinar las causas y preguntarnos cómo evitar que
vuelva a sucedes en el futuro».
Considerando que la educación y la evangelización
son enemigas de los sistemas totalitarios; que la libertad no puede permanecer tanto
tiempo atrapada en la violencia; y que el fundamentalismo acabará en la derrota, el
Card. Oswald Gracias afirmó: «Ciertamente. No puede vencer. Nuestra esperanza está
en la resurrección de Jesús. Y nosotros sabemos que la victoria será siempre de Jesús».