Benedicto XVI encomienda a la Virgen a todos los participantes en el III Congreso
misionero continental, y en el VIII Congreso Misionero Latinoamericano, cuyo lema
es «América con Cristo: Escucha, aprende y anuncia»
Sábado, 2 ago (RV).- Se ha dado a conocer la Carta con la que Benedicto XVI nombra
al Card. Nicolás de Jesús López Rodríguez, arzobispo de Santo Domingo, como enviado
especial del Papa para las celebraciones del III Congreso Americano Misionero –CAM3-
y del VIII Congreso Misionero Latinoamericano -COMLA8– que tendrán lugar en la capital
de Ecuador, Quito, del 12 al 17 de agosto.
«La Iglesia, enviada por Cristo
para manifestar y comunicar la caridad de Dios a todos los hombres y pueblos, sabe
que le queda por hacer todavía una obra misionera ingente», con estas palabras del
Decreto conciliar Ad gentes, Benedicto XVI destaca la importancia de la celebración
quiteña, que con el lema «América con Cristo: Escucha, aprende y anuncia», reunirá
a más tres mil participantes en lo que ya se denomina ‘una gran fiesta misionera’.
Tras
manifestar su profunda gratitud y aprecio al Card. González Zumárraga Arzobispo emérito
de Quito, y presidente de Honor de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, así como
de la comisión central de este gran evento misionero de América, Benedicto XVI se
dirige a todo el amado pueblo de Ecuador, agradeciendo su ardiente devoción y manifiesta
adhesión al Sucesor de Pedro.
Benedicto XVI termina su misiva encomendando
a la Virgen María, Madre de Dios y Patrona del continente americano, a todos los participantes
en el III Congreso misionero continental y en el VIII Congreso Misionero Latinoamericano.
En
este contexto, recordamos que el nombramiento del Card. Nicolás de Jesús López Rodríguez,
como enviado del Papa para las celebraciones del CAM3 y del COMLA8 se había publicado
el pasado mes de junio, como les informamos en su día. Hoy, además de hacerse pública
la Carta que el Santo Padre le ha enviado, se ha dado a conocer la Misión que acompañará
al Cardenal Arzobispo de Santo Domingo. Se trata de Mons. Ricardo Flatz, Administrador
Apostólico del Vicariato Apostólico de Zamora, en Ecuador, y de Mons. José Vicente
Eguiguren Samaniego, Vicario para la Pastoral de la Archidiócesis de Quito.