2008-07-18 16:37:56

Benedicto XVI almuerza con 12 jóvenes, representantes de sus coetáneos de todo el mundo, y participa en el Vía Crucis


Viernes, 18 jul (RV).- El Papa, después de haber almorzado con 12 jóvenes, en representación de sus coetáneos de todo el mundo, en la residencia pontificia - que recordamos es en la Casa de la Catedral de Sydney - se ha unido a los numerosísimos jóvenes reunidos en la plaza que se encuentra ante esta misma Catedral y que iban a participar en el Vía Crucis por las calles de la ciudad.

Sydney en versión “Jerusalén del Tercer Milenio” ha visto pasar por sus calles, el Vía Crucis de la Jornada Mundial de la Juventud. Catorce estaciones desde la Catedral de Santa María hasta el puerto de Barangaroo que se asoma hasta la bahía. Siete han sido los escenarios naturales, Jesús interpretado por un joven italo-australiano de 26 años, cien actores y los textos de las meditaciones preparados por el jesuita Peter Steele, pero también músicas – del gospel al rock hasta legar al gregoriano – danzas, juegos de luces, todo bajo la dirección de D. Franco Cavada.

Benedicto XVI, que ha leído una oración después de la primera estación, ha seguido el itinerario recogido en oración ante una pantalla colocada en la cripta de la Catedral.


? Y una vez más nuestro compañero Raúl nos ofrece los detalles de las actividades de la tarde del Papa en Sydney. RealAudioMP3

En la tarde, con un tiempo cambiante que contribuía a la ocasión, el Papa oró en la primera estación del Via Crucis que inició en la plaza adyacente a la Catedral de S. Mary. El Pontífice siguió el camino de la Cruz a través de la televisión, desde la Cripta de la Catedral. Este año el Via Crucis se desarrolló en forma “bíblica” que se diferencia de aquella que comúnmente conocemos, por que cada estación está dedicada a un evento testimoniado en las Escrituras. Las estaciones del Via Crucis escenificadas en diversas partes de la ciudad fueron un impecable espectáculo coreográfico/musical realizado por 80 actores. El escenario: las calles y la Bahía de Sydney al crepúsculo. Los personajes: un aborigen representando al Cireneo. El pueblo, conformado por los jóvenes presentes… La dramática historia acaecida hace dos mil años en un escenario moderno a más no poder. Una representación verdaderamente inédita y conmovedora.
Luego, el Santo Padre se trasladó en papamóvil hasta la universidad de Notre Dame Australia. En el trayecto hasta aquí, tuvo otro baño de multitudes. En el Ateneo, el Papa encontró a un grupo de jóvenes con problemas de adaptación. Escuchó sus difíciles circunstancias de vida, y su lucha por salir adelante. Oró por y con ellos. Les dio palabras de estímulo… El pastor vino a Sydney también por estas ovejas.







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