El mensaje de Benedicto XVI a las iglesias de Bielorrusia será llevado por el Cardenal
Secretario de Estado, Tarcisio Bertone, durante la visita oficial que emprende mañana,
hasta el próximo domingo, a esta antigua república soviética
Martes, 17 jun (RV).- El Cardenal Secretario de Estado de Benedicto XVI emprenderá
mañana su anunciada visita oficial a Bielorrusia. El purpurado permanecerá cinco días
en la antigua república soviética, donde llegará el miércoles, al aeropuerto de la
capital Minsk. El jueves tendrá el esperado encuentro con el Metropolita ortodoxo,
Filarete, exarca patriarcal de toda Bielorrusia. El cardenal se encontrará también
con el presidente del Comité para los Asuntos Religiosos y las Minorías étnicas del
Consejo de Ministros, Guljak; y con el ministro de exteriores, Martynov.
El
jueves por la tarde el cardenal Bertone tendrá la Lectio Magristralis al mundo de
la cultura, a los profesores y estudiantes de la Universidad Estatal bielorrusa, sobre
el tema: “Fe y Razón: hablar de Dios al hombre de hoy”. Luego, el cardenal visitará
a la comunidad greco-católica y asistirá en el Teatro Nacional de Ballet a un montaje
sobre “La Creación del mundo”.
El viernes, tendrá lugar el encuentro con la
Conferencia Episcopal Bielorrusa; y acto seguido será recibido por el presidente ruso,
Lukasenko. Por la tarde el purpurado en la catedral de Pinsk se encontrará con el
cardenal Kazimierz y se cantarán las Vísperas.
El sábado, el cardenal Bertone
se encontrará ya en otra cuidad: en Grodnom, en cuya catedral celebrará la santa misa
y tendrá un encuentro con los sacerdotes y religiosos de Bielorrusia; por la tarde,
de nuevo en Minsk, presidirá la bendición de la primera piedra de la iglesia de San
Juan Bautista y tendrá un encuentro con los jóvenes.
El domingo, el cardenal
encontrará a la comunidad parroquial en la iglesia de de los santos Simón y Elena;
y tras deponer una corona de flores en la plaza de la Victoria, celebrará la Santa
misa en la catedral de Minsk. Pasado el mediodía conferencia de prensa final antes
del almuerzo de despedida con los obispos y con el visitador apostólico para los fieles
greco-católicos.