Cultura y humanismo: IV aniversario de la Instrucción Erga migrantes caritas Christi
Miércoles, 21 may (RV).- La Instrucción “Erga migrantes caritas Christi” – La caridad
de Cristo hacia los inmigrantes, fue publicada a principios del mes de mayo de 2004
por el Pontificio Consejo de la Pastoral para los Migrantes e Itinerantes. En el programa
de hoy dedicado a la Cultura y al Humanismo, queremos recordar, en el cuarto aniversario
de la firma del documento, la importancia del mismo, y lo haremos de la mano del arzobispo
Agostino Marchetto, secretario del dicasterio, quien recientemente explicó la importancia
de la Instrucción.
De hecho, la Instrucción considera a la comunidad mundial
como una “familia de pueblos, a quienes están destinados los bienes de la tierra,
en una perspectiva del bien común universal”, explica el arzobispo Marchetto matizando
que en ella, se critica lo que la globalización ha realizado, porque “ha abierto el
mercado pero no las fronteras, y ha roto los límites para la libre circulación de
la información y del capital, pero no de las personas”.
En este sentido, Mons.
Marchetto señala un fenómeno fundamental de nuestro mundo de hoy: el de la migración.
“Este fenómeno –explica el secretario del Pontificio Consejo de la Pastoral para los
Migrantes e Itinerantes- expone un verdadero problema ético, el de la búsqueda de
un nuevo orden económico internacional para una distribución equitativa de los bienes
de la tierra, que contribuiría a reducir y moderar los flujos de una numerosa parte
de la población en dificultad”.
Precisamente por este motivo, el documento
“Erga migrantes caritas Christi” pone de relieve el deber de defender los derechos
del hombre y de la mujer migrante y los de sus hijos, así como la tutela y valorización
de las minorías.
Precisamente la defensa de los derechos humanos, no sólo para
los migrantes, sino universales, la puso de relieve recientemente el Santo Padre Benedicto
XVI durante su viaje a Estados Unidos, en particular en la sede de Naciones Unidas
en Nueva York, donde celebró el 60 aniversario de la conmemoración de los principios
inalienables del ser humano que tienen que ser defendidos en todo el mundo.
Mons.
Agostino Marchetto sabe que el camino es difícil, por lo que es necesario como él
mismo señala, “un renovado sentido de la solidaridad y una profundización de los valores
compartidos con otros grupos religiosos o laicos, absolutamente indispensables para
asegurar una convivencia armoniosa”. De este modo, “el paso de sociedad monocultural,
a sociedad multicultural, puede realizarse como signo de la vida presencia de Dios
en la historia y en la comunidad de los hombres”.
En el cuarto aniversario
de la publicación de la Instrucción “Erga migrantes caritas Christi” que este mes
de mayo se celebra, el secretario del dicasterio de la Pastoral para los Migrantes
e Itinerantes, el arzobispo Agostino Marchetto, habla del momento histórico actual,
que permite acercarse incluso físicamente de forma más fácil las mil caras de los
demás seres humanos. En este sentido, Mons. Marchetto matiza que “los cristianos estamos
llamados a testimoniar y practicar, además del espíritu de tolerancia, el respeto
de la identidad de los demás, iniciando, donde es posible y conveniente, recorridos
compartidos con personas de orígenes y culturas diferentes, dando de este modo anuncio
del respeto de la propia fe”.
“A través de la cultura de la solidaridad –concluye
el prelado en este especial aniversario- tantas veces deseada desde el Magisterio
de la Iglesia, se puede alcanzar juntos, una verdadera comunión de personas. Es el
camino, difícil, que la Iglesia invita a recorrer”.