2008-05-14 14:47:54

Telegrama de pésame del Papa por la muerte del cardenal Bernardin Gantin


Miércoles, 14 may (RV).- Benedicto XVI expresa su pésame por la muerte del cardenal Bernardin Gantin, ocurrida ayer en París, a los 86 años de edad, después de una larga enfermedad. En un telegrama enviado al arzobispo de Coutonou, Mons. Marcel Honorat Léon Agboton, el Papa se une fervientemente en la oración a los obispos de la Conferencia Episcopal de Benín, a los fieles de esta archidiócesis y a los de toda la nación beninesa. Así como a los familiares y a las personas que están en duelo por su fallecimiento.

Pidiendo a Dios, Padre de todas las misericordias, que acoja en su luz y en su paz a este hijo eminente de Benín y de África, el Santo Padre destaca que el cardenal Bernardin Gantin, tan «estimado por todos, estaba animado por un espíritu profundamente apostólico y un sentido elevado de la Iglesia y de su misión en el mundo».

En acción de gracias al Señor, por el ministerio fecundo del cardenal Gantin – primero como arzobispo de Coutonou, luego durante largos años en la Santa Sede, el Papa destaca el servicio desarrollado con gran generosidad por el purpurado africano. En la Congregación para los Obispos y como miembro y, luego, como Decano del Colegio Cardenalicio. Benedicto XVI extiende su consoladora bendición apostólica a todos los obispos de Benín, a la familia del purpurado fallecido, al clero, a los catequistas, a todos los fieles benineses y a todos aquellos que participan en sus exequias.

El cardenal Bernardin Gantin era, recordamos, prefecto emérito de la Congregación para los Obispos, presidente emérito de la Pontificia Comisión para América Latina y Decano emérito del Colegio Cardenalicio. El purpurado, natural de Benín, había nacido en Toffo, en la diócesis de Cotonou, el 8 de mayo de 1922. Creado cardenal por el Papa Pablo VI en el 27 de junio de 1977, fue el primer purpurado africano que presidió un dicasterio de la Curia Romana, donde trabajó durante largos años y contando también con un gran aprecio por parte de Juan Pablo II.

Se desempeñó también como vicepresidente, primero y luego como pro-presidente y presidente de la Pontificia Comisión Justicia y Paz. Siendo también vicepresidente y presidente del Pontificio Consejo Cor Unum. Con el fallecimiento del cardenal Bernardin Gantin, el Colegio Cardenalicio queda integrado ahora por 194 miembros, de los que 118 son electores.







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