La Santa Sede considera importantes “todos los gestos de reconciliación entre las
distintas fuerzas presentes en Cuba”
Martes, 26 feb (RV).- El cardenal Bertone regresa hoy a Roma después de haber visitado
durante una semana la isla de Cuba, para presidir las celebraciones conmemorativas
de la histórica visita de Juan Pablo II a la isla caribeña, hace diez años. El domingo,
el secretario de estado intervino con una alocución sobre cultura y ética en la Universidad
de La Habana. Por la mañana, el purpurado tuvo un encuentro de trabajo con el ministro
de exteriores, Felipe Pérez Roque. Después de un breve saludo a la prensa cubana e
internacional, en el que estuvieron presentes también algunos obispos cubanos, el
cardenal Bertone encontró al Cuerpo diplomático acreditado ante el gobierno de La
Habana.
Ayer, último día de su visita, el cardenal secretario de estado empezó
la jornada celebrando la Santa Misa para la comunidad salesiana. Acto seguido visitó
la Escuela Latinoamericana de Medicina (Elam) en la que estudian centenares de jóvenes
de 14 países de la zona caribeña. Poco antes de su viaje de regreso, el purpurado
se ha entrevistado con el nuevo presidente cubano, Raúl Castro y otros ministros.
En
palabras a la prensa el cardenal Tarcisio Bertone subrayó “los desarrollos positivos
y la madurez” constatada en las relaciones entre Iglesia y autoridades cubanas. “Trabajamos
para encontrar el camino e ir hacia delante. Espero que las relaciones maduren cada
vez más”. En más de una respuesta, el secretario de estado ha querido insistir en
que la Santa Sede considera importantes “todos los gestos de reconciliación entre
las distintas partes, y entre las distintas fuerzas presentes en Cuba”, precisando
que la Iglesia ha pedido “poder asistir espiritualmente a los prisioneros, porque
se trata de una cuestión humanitaria y no política”.
Por su parte la Conferencia
Episcopal cubana, ha difundido un breve comunicado en el que se lee: “Como lo hicimos
en Navidad, queremos también ahora renovar nuestros votos de confianza, y con esperanza
cristiana, formular estos deseos al nuevo presidente Raúl Castro, al Consejo de Estado
y a la Asamblea del Poder Popular, teniendo siempre ante nuestros ojos el bien común
del pueblo cubano al cual servimos, y pidiéndole al Señor el don de la paz para nuestra
nación”.
En el comunicado, los prelados piden a Nuestra Señora de la Caridad
del Cobre, Patrona de Cuba, que las nuevas autoridades puedan “llevar adelante con
decisión esas medidas trascendentales que sabemos deben ser progresivas, pero que
puedan comenzar a satisfacer desde ahora las ansias e inquietudes expresadas por los
cubanos”.