En su carta al nuevo director de L’Osservatore Romano el Papa recuerda la gran responsabilidad
que tiene por la peculiaridad del periódico Vaticano y alude a su alto nivel profesional
como a su pertenencia a una ilustre familia de gran tradición cristiana en el servicio
a la Sede Apostólica
Sábado, 27 oct (RV).- El Santo Padre ha enviado una carta al nuevo director de L’Osservatore
Romano, el profesor Giovanni Maria Vian. En la misiva Benedicto XVI le recuerda al
nuevo director la gran responsabilidad que tiene por la peculiaridad del periódico
Vaticano y alude tanto a su alto nivel profesional como a su pertenencia a una ilustre
familia de gran tradición cristiana en el servicio a la Santa Sede.
Seguidamente
el Pontífice le recuerda que L’Osservatore Romano nació para mantener la libertad
de la Santa Sede en un momento crítico y providencial de su historia y que ha difundido
las enseñanzas de los Romanos Pontífices y las intervenciones de sus más estrechos
colaboradores sobre los problemas cruciales que la humanidad encuentra en su camino.
También
el Papa subraya la imparcialidad que mantuvo el “periódico del Papa”, durante la primera
guerra mundial y también en la segunda. “El periódico ubicado desde 1929 al interior
del Estado vaticano –acreditó ulteriormente su prestigio y su difusión, gracias también
a la posibilidad que el periódico tenía de acceder a fuentes de información que en
aquel periodo solamente la independencia vaticana podía garantizar”. Después se publicaría
en ediciones periódicas en diversas lenguas, asegurando de esta manera una difusión
realmente internacional.
Esta dimensión mundial, le recuerda el Papa al nuevo
director, es más concreta y eficaz por medio de la posibilidad que hoy ofrecida por
la presencia de la “red”, resultando muy importante para expresar verdaderamente la
realidad de la Iglesia universal, la comunión de todas las Iglesias locales y su enraizamiento
en las todavía más en las diversas situaciones, en un contexto de sincera amistad
hacia los mujeres y hombres de nuestro tiempo.
EL Papa finaliza su carta al
director del periódico vaticano manifestándole que, “buscando y creando ocasiones
de discusión, L’Oservatore Romano” podrá servir cada vez de manera mejor, a la Santa
Sede, mostrando la fecundidad del encuentro entre la fe y la razón, gracias a la que
se hace posible también una cordial colaboración entre creyentes y no creyentes”,
su finalidad fundamental permanece obviamente en la de favorecer en las culturas de
nuestro tiempo la apertura confiada y, al mismo tiempo, profundamente razonable a
lo Trascendente en lo que en última instancia se fundamenta el respeto a la dignidad
y a la auténtica libertad de todo ser humano.