Reunión del Consejo Episcopal Permanente de la Conferencia Episcopal Italiana
Martes, 18 sep (RV).- “Los obispos italianos están con el Papa”. Lo subrayaba ayer,
mons. Angelo Bagnasco presidente de la Conferencia Episcopal Italiana abriendo los
trabajos del Consejo Episcopal Permanente de la Conferencia Episcopal Italiana. mons.
Bagnasco ha asegurado a Benedicto XVI, en nombre de todos los prelados, su fidelidad
y su siempre dispuesta e incondicionada colaboración, “de manera particular cuando
emergen en la opinión pública voces críticas y discordantes”.
El presidente
de la Conferencia Episcopal Italiana, en su discurso, puso también en videncia que
Italia corre el riesgo de "quedar desplazada y de sufrir una crisis moral" si no pone
freno a los comportamientos "criminales" que no parecen encontrar solución y cada
vez están más difundidos.
El arzobispo de Génova, tildó de "comportamiento
criminal" los recientes incendios de bosques que han afectado a todo el país, especialmente
el sur, "causados por el hombre y que han puesto de rodillas a enteras regiones".
El arzobispo también incluyó los recientes casos de asesinatos de mujeres, así como
"la clamorosa inclusión del aborto como un derecho humano".
Mons. Bagnasco
abogó también en su discurso a la necesidad de que se dé una solución a las gentes
que esperan una casa y no pueden comprarla o alquilarla y denunció el problema del
paro y la situación en que se encuentran muchas familias o pensionistas que sólo tiene
una renta y muy baja para vivir. Mons. Bagnasco criticó el "relativismo" existente
en la sociedad actual y expresó su preocupación ante una sociedad "afectada por un
extraño odio de sí misma, que hace del relativismo su propio credo". El presidente
de la CEI abogó por una sociedad "sana", inspirada en los valores del Evangelio, que
defiende la familia y la vida.