Mensaje de Benedicto XVI con motivo del X Simposio Intercristiano, que se celebra en la isla griega de Tinos - «donde ortodoxos y católicos conviven fraternamente»

Lunes, 17 sep (RV).- «La cooperación ecuménica en ámbito universitario contribuye a mantener viva la tensión hacia la anhelada comunión entre todos los cristianos». Lo reitera Benedicto XVI en un mensaje enviado al presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, cardenal Walter Kasper, a quien ha recibido en audiencia esta mañana.

Con motivo del X Simposio Intercristiano, que se está celebrando en la isla griega de Tinos - «donde ortodoxos y católicos conviven fraternamente» - el Santo Padre manifiesta su especial alegría por este encuentro promovido por el Instituto Franciscano de espiritualidad de la Pontificia Universidad Antonianum y por el Departamento de Teología del ateneo Aristóteles de Tesalónica.

Destacando el tema del Simposio, ‘San Juan Crisóstomo, puente entre Oriente y Occidente’, el Papa señala que el mil seiscientos aniversario de la muerte de este ilustre Padre de la Iglesia, que se cumplió el pasado 14 de septiembre, es una gran ocasión para conmemorar a este valiente, iluminado y fiel predicador de la Palabra de Dios.

Recordando que, después de complejos eventos históricos, desde 1626 los restos de san Juan Crisóstomo reposan en la Basílica de San Pedro y que, en noviembre de 2004, su venerado predecesor el Siervo de Dios Juan Pablo II donó una parte de las reliquias al Patriarca Ecuménico Bartolomé I, Benedicto XVI destaca que de esta forma, tanto en la Basílica Vaticana, como en la Iglesia de San Jorge en El Fanar se venera a este extraordinario y valiente hermeneuta, fiel testigo evangélico también en la persecución y el exilio.

El Pontífice señala que «analizando algunas problemáticas actuales», «la reflexión sobre san Juan Crisóstomo y la comunión con la Iglesia de Occidente contribuirá a sostener y corroborar la comunión verdadera, aunque todavía imperfecta, existente entre católicos y ortodoxos». De forma que «se pueda alcanzar aquella plenitud, que nos permitirá concelebrar un día la única Eucaristía». Día bendito - añade Benedicto XVI - «al que miramos todos con esperanza», dando vida también a providenciales iniciativas como este mismo encuentro.

Bendiciendo a todos los participantes, con el deseo de que el Espíritu Santo ilumine sus mentes y colme sus corazones con la paz del Señor, el Papa envía también un fraternal saludo a todos los fieles ortodoxos y católicos griegos y, en particular, al arzobispo de Atenas y de toda Grecia, su Beatitud Christodoulos, asegurando sus oraciones para que se restablezca pronto y pueda reanudar cuanto antes su servicio pastoral.

El Mensaje del Santo Padre termina invocando a la Madre de Dios, tan venerada y amada en la isla griega de Tinos, para que interceda con el fin de que «nuestros comunes propósitos sean coronados por los anhelados frutos espirituales». Este X Simposio Intercristiano, que se está celebrando desde ayer y que se clausurará el próximo día 19 de septiembre, forma parte de una iniciativa de las dos facultades teológicas del Instituto Franciscano de espiritualidad de la Pontificia Universidad Antonianum y del Departamento de Teología del ateneo Aristóteles de Tesalónica.

La Iglesias ortodoxa y cristiana acogen esta iniciativa, alternándose cada dos años, con el fin de perseverar en la búsqueda del patrimonio común de fe y de tradiciones, impulsando el diálogo ecuménico.