El Papa a través del Consejo Pontificio Cor Unum envía ayuda económica para socorrer
a las poblaciones afectadas por el devastador terremoto que asoló la semana pasada
Perú
Lunes, 20 ago (RV).- Benedicto XVI ha dispuesto el envío de 200.000 euros para destinar
a ayudas de emergencia a la población afectada por el terremoto que el pasado miércoles
asoló el Perú. Una nota de la Oficina de prensa de la Santa Sede explica que “con
este gesto, el Papa desea mostrar la rápida intervención de la Iglesia hacia las personas
que han perdido a sus seres queridos y sus posesiones". Su Santidad "anima a todos
los fieles y organizaciones de ayuda vinculadas a la Iglesia a que se empeñen en todas
las posibles acciones de caridad hacia las poblaciones afectadas".
Como ya
adelantó ayer el mismo Pontífice en su alocución ante del Ángelus en Castelgandolfo,
la nota recuerda que el secretario de Estado, cardenal Tarcisio Bertone, irá a Perú
la próxima semana, en un viaje ya programado desde hace tiempo, y visitará la región
de Ica, golpeada por el seísmo “para dar testimonio en primera persona de los sentimientos
del Santo Padre y de la ayuda concreta de la Santa Sede”.
En Perú mientras
tanto, el responsable de Protección Civil en la zona de Ica, ha declarado que hasta
el martes se seguirán buscando supervivientes. Las víctimas por el fuerte seísmo ascienden
hasta el momento a 503 personas muertas y 1.042 heridas.
Desde Cor Unun,
dicasterio conocido como el “de la caridad del Papa, escuchemos ahora a Mons. Karel
Kasteel, que es el secretario de este Pontificio Consejo, y que nos explica la proximidad
del Santo Padre con todas las víctimas y las personas afectadas por este desolador
seísmo.
Hemos
recogido también el testimonio del embajador de Perú ante la Santa Sede, don Alfonso
Rivero, que nos explica eleco que han tenido las palabras del Santo Padre
en su país. Sentimientos
del Papa y caridad de la Santa Sede: "gestos de hermandad concretos" para ayudar a
las víctimas que habrán tenido una gran resonancia en su país, ¿no es así?
Inmediata
ha sido la solicitud del Santo Padre con la población peruana, pero grande ha sido
también la respuesta en todo el mundo, donde se ha puesto en marcha la solidaridad,
la caridad y la sensibilidad".